La Consejería de Agricultura y Desarrollo Económico del Cabildo ha puesto en marcha en el matadero insular, ubicado en el municipio de El Paso, una línea para sacrificar conejos, con la que ofrece a los cunicultores de la Isla un espacio en el que faenar sus animales cumpliendo con todas las normativas europeas en materia sanitaria.

El sacrificio de conejos se produce todos los lunes. Los cunicultores llevan sus animales al matadero y pagan 50 céntimos por unidad, además de otros 10 céntimos por kilogramo por el traslado hasta los puntos de venta que el propio ganadero tiene previamente contratados.

Lo cierto es que una gran parte de los conejos que se consumen en la Isla llegan desde el exterior, mientras que otros se pueden encontrar en establecimientos públicos sin que hayan sido tratados cumpliendo con la legislación vigente. Es más, son apenas catorce, al menos por ahora, los cunicultores que trabajan con el matadero insular.

El consejero del área, César Martín, explicó que los cunicultores "tenían una habitación al lado de la explotación en la que faenaban sus conejos, pero las normativas europeas en materia sanitaria se han endurecido y son tan estrictas que prácticamente impiden estos sacrificios sin antes hacer una inversión cuantiosa en acondicionar las granjas". El Cabildo no tiene competencias en materia ganadera, pero "teníamos que dar respuesta a este colectivo".

Martín informó además de que en el Plan Insular de Ordenación Territorial "hay una propuesta para facilitar la incorporación de ganaderos al mundo de la cunicultura", que con esta nueva línea "será rentable, a un precio público asequible".