El director territorial de Educación, José Zenón Ruano, se enfrentó ayer durante una rueda de prensa a una nueva protesta del colectivo de padres y madres del Colegio Miranda de Breña Alta, tras anunciar oficialmente que había ordenado a la directora del pequeño y prestigioso centro educativo, como medida cautelar, que no sacase a oferta ninguna plaza vacante para el próximo curso escolar, pese a que se realizó la prematrícula de 57 nuevos alumnos en un colegio en el que ya había sobresaturación con 122 niños.

Zenón convocó a la prensa para explicar los tiempos del proyecto de ampliación del CEIP previsto hace varios años, aún sin ejecutar, y anunciar la medida adoptada para evitar nuevas incorporaciones de alumnos al colegio, tras escuchar o leer, de boca de los padres, en la manifestación que hicieron por las calles de la capital palmera, que no entendían cómo se habían permitido nuevas matriculaciones en un centro con 2 aulas reales, más otras dos habilitadas y tres más modulares (containers).

La rueda de prensa, en la que también participó el director insular de Educación, Vicente Brito (concejal, por cierto, en Breña Alta), comenzó sin sobresaltos. Primero, los pasos dados en Educación desde diciembre de 2009, los problemas con el suelo, los trámites administrativos, los tiempos de la Administración (local y regional)... hasta llegar al pasado mes de marzo, en el que la Consejería inició el proceso de licitación de las obras de ampliación, con un presupuesto de 631.000 euros. Eso sí, "el centro no estará acabado antes de un año".

Hasta ahí, la parte vinculada a la instalación. Pero, como medida preventiva o cautelar, José Zenón anunció entonces la prohibición temporal de nuevas matriculaciones en este colegio, una orden inmediata dada a la directora ante la apertura del plazo de admisión de nuevos alumnos. La medida sólo afectará al próximo curso, hasta que se amplíe el centro. El director territorial reconoció que se tomada la decisión tras conocer la protesta de los padres con niños ya matriculados, aunque también dijo que "se informó al Ampa hace un mes y que los padres conocían las condiciones de escolarización y carencias que ha tenido el centro, en el momento que decidieron matricular los niños allí".

Boicot de los padres

Pero esos padres y madres aparecieron, sin invitación, en la rueda de prensa e intentaron suplantar la función de los periodistas allí presentes, primero con preguntas directas que el director territorial de Educación se negó a responder, "sólo a periodistas", y luego con preguntas sugeridas a la prensa, alguna apuntada en papel.

Ante la presencia de los padres, que portaban carteles con la leyenda: "Aulas dignas para el CEIP Miranda", Zenón Ruano sólo insistió en que la decisión de limitación de matrículas era cautelar.

Una vez acabada la rueda de prensa, según confirmaron desde el Ampa, hubo reunión entre el representante de Educación y los padres que se plantaron en la sala. Se planteó la posibilidad de llegar a una acuerdo, aunque oficialmente la Consejería no ha informado de nada al respecto.