El Ministerio de Medio Ambiente no comparte el proyecto aprobado por la Comisión de Ordenación del Territorio y Medio Ambiente de Canarias (Cotmac) para la ampliación del complejo de las Salinas de Fuencaliente (la única que queda en la provincia) con un centro de interpretación y un restaurante, a fin de diversificar la actividad de la misma para salvar su explotación, actualmente deficitaria.

La actuación fue autorizada en su día por la Consejería de Política Territorial y Medio Ambiente del Gobierno de Canarias, que aceptó el proyecto propuesto por la propiedad para explotar turísticamente este recurso, a fin de rentabilizar la actividad desde el punto de vista empresarial, teniendo en cuenta que se trata de un espacio protegido, por su alto valor paisajístico.

Sin embargo, el Ministerio, por mandato de la Dirección General de Costas, ha recurrido ante la Sala de lo Contencioso-Administrativo del Tribunal Superior de Justicia de Canarias el acuerdo de aprobación definitiva de la modificación puntual de las normas de conservación de las Salinas de Fuencaliente, por lo que el Gobierno de Canarias ha tenido que remitir el expediente administrativo al tribunal.

La Administración estatal no comparte la modificación realizada para el uso de la servidumbre de protección con la creación de nuevas instalaciones. Según explica el viceconsejero en funciones de Ordenación Territorial del Gobierno de Canarias, Miguel Ángel Pulido, "el Ministerio no ha entendido el objetivo de una actuación prevista para salvar las Salinas, que no se debe únicamente a la aplicación de normas, sino a la necesidad de generar actividad para evitar su desaparición".

La edificación actual, según el viceconsejero, "tiene serios problemas estructurales y se necesita un nuevo edificio de almacenamiento. No se puede paralizar la actividad salinera, por eso se habilitó otro suelo en el que el impacto era mínimo. Luego se pretende reconvertir el edificio antiguo en un centro de interpretación para atraer actividad turística". Así, aclaró, "si no entendemos eso, es que no sabemos dónde estamos".

Por ello, la Consejería de Medio Ambiente tiene previsto reunirse en breve con el Ministerio para, entre otros asuntos, abordar el problema de las Salinas de Fuencaliente y su importancia, a fin de aclarar la necesidad de generarle ingresos complementarios para evitar su desaparición. Por ahora, ante la postura adoptada por el departamento estatal, parece que la ejecución del proyecto se resolverá en los tribunales.

El promotor, Andrés Hernández, en representación de Salinas Marinas de Fuencaliente SL, manifiesta que esta denuncia les crea cierta incertidumbre, aunque espera poder iniciar su ejecución pese a las pegas mostradas por Costas, teniendo en cuenta que el ayuntamiento ya tramitó la licencia para la puesta en marcha de esta nueva actividad en la explotación.