El 30% de los comercios del casco histórico de Santa Cruz de La Palma están en serio riesgo de desaparecer durante este año por la grave crisis económica, según reconocieron ayer los nuevos rectores de la asociación de empresarios.
El nuevo presidente y vicepresidente de la patronal capitalina, Juan Arturo San Gil y Carmelo Martín, respectivamente, presentaron ayer a la junta directiva entrante, formada por 26 empresarios, en un acto donde se informó de la delicada situación que vive el sector en el casco histórico, donde tras perder pymes históricas, con décadas de funcionamiento, se enfrenta a un año difícil "donde 500 personas pueden perder su puesto de trabajo por el cierre de sus empresas".
Los empresarios son conscientes de que la crisis es mundial, una razón que, sin embargo, no quieren que sirva de argumento para esconder las dificultades propias de la capital, como, por ejemplo, "la falta de aparcamientos. Con la feria del Carnaval se van a eliminar otros 90 estacionamientos en el puerto, mientras que la zona azul sigue operando solo por la mañana en diferentes zonas. En la avenida de El Puente, por ejemplo, hay gente que deja el coche a partir de la una del mediodía en zona azul y ya no lo saca hasta por la mañana del día siguiente", según manifestó el nuevo presidente.
San Gil defendió además "un esfuerzo por atender las necesidades de los turistas que llegan en cruceros. Saber qué necesitan, qué opinan de nuestros servicios y por qué se gastan en Tenerife una media superior a los 40 euros y aquí, en La Palma, menos de 20", destacando que "hay informes sobre la opinión de los visitantes, pero no se han entregado a los asociados. Quizás también sea cierto que nosotros debamos adaptarnos a las nuevas tendencias".
Perdió el 40% de socios
Uno de los objetivos de la nueva junta directiva de la Asociación de Empresarios del Casco Histórico de Santa Cruz de La Palma es volver a ser un colectivo fiable y de utilidad para todos los comerciantes. En este sentido, el presidente admitió que "ahora somos unos 105 asociados, después de que en los dos últimos años se hayan dado de baja unos sesenta", lo que representa más del 36% del total. Con esa idea, en la junta directiva están representados todos los subsectores comerciales, así como de diferentes áreas, con lo que se pretende que "nadie se sienta desplazado y que estén donde estén ubicados sus comercios y con independencia de su actividad, se sientan representados".
San Gil entiende que la gente se fue marchando de la asociación "porque en ocasiones se necesitan de nuevos impulsos, de que todos los socios reciban la información que necesitan, que haya comunicación entre la directiva y los socios... Nosotros entendemos que es el momento de que todos arrimemos el hombro, de trabajar juntos en beneficio del colectivo". Quiso agradecer, por último, "el trabajo de la junta directiva saliente en el tema económico. Hay en cuenta unos 20.000 euros para comenzar a desarrollar acciones".