La Asociación de Niños Especiales de La Palma (NEP) necesita de unos 40.000 euros para legalizar el centro de rehabilitación abierto desde finales de 2010 en la zona de Jedey, en el municipio de Los Llanos de Aridane, y que atiende a medio centenar de menores con algunas lesiones neurológicas, siendo el único servicio de estas características que oferta la Isla.

El principal inconveniente de no contar con la legalización del centro, que dispone de un permiso provisional para poder seguir funcionando, es la imposibilidad de acceder a la autorización de Unelco Endesa para engancharse a la red eléctrica, por lo que el suministro depende en exclusiva de un motor auxiliar en el que los miembros de la asociación se gastan unos 60 euros a la semana en combustible.

Fuentes de la asociación explicaron a EL DÍA que uno de los servicios que deben ser sometidos a pruebas es la piscina climatizada del centro, pero "para probarla se necesita de una potencia de energía que el motor no puede ofrecer, por lo que debe estar conectada a la red general. Hemos pedido que nos dejen conectarnos para hacer las pruebas y nos dicen que lo primero es la legalización de la edificación para luego poder engancharnos. La pescadilla que se muerde la cola mientras nos gastamos un dineral en gasoil".

Desde NEP se advierte de que la asociación no cuenta con los recursos económicos suficientes para poder hacer las actuaciones que se exigen para legalizar el centro, mientras que desde las instituciones "cada vez es más difícil obtener recursos".

La construcción del centro, un sueño que se convirtió en realidad 14 años después, fue producto de un acuerdo entre este colectivo y el Cabildo de La Palma, que se encargó de financiar gran parte de la obra, que además contó con la aportación de muchas familias a través de donativos, participando en conciertos, ferias o cenas benéficas. Sin embargo, para el funcionamiento del recurso, que a la postre cubre la falta de ofertas de este tipo por parte de las administraciones públicas, es fundamental la aportación de los asociados.

Desde NEP se afirma que "nosotros hace tiempo que ya utilizamos el copago, eso de lo que tanto se habla ahora. La falta de ayudas hizo que la asociación tuviera que incrementar la aportación de las familias, que ahora pagan el 30% del coste de los servicios", resultando clave para pagar a los profesionales la ayuda que anualmente concede el Cabildo de La Palma a través de la plataforma Indispal. "Lo que no podemos hacer es dejar a nuestros hijos sin la verdadera atención de rehabilitación que necesitan", sentencian. El centro cuenta con salas para ofrecer servicios de fisioterapia, logopedia y psicopedagogía, piscina y sala polivalente para acoger distintas actividades.