Carlos Soler vive una situación casi angustiosa. El consejero de Agricultura del Gobierno de Canarias, Juan Ramón Hernández Gómez, lo destituyó de su puesto, no era de su "agrado", y fue enviado a Hacienda, donde lleva tres meses sin que le encarguen ni un solo trabajo, ya que su titulación no es la adecuada para este servicio.