La reordenación del tráfico en la avenida Marítima de Santa Cruz de La Palma, por las obras de instalación de la nueva red saneamiento, incumple un informe emitido por la Policía Local, en el que se advierte del peligro que supone dejar la vía con tan solo dos carriles de circulación, ante cualquier emergencia que se pueda producir.

El informe policial no es, ni mucho menos, nuevo. En concreto, fue el documento que se mostró a los comerciantes de la avenida para justificar la supresión de uno de los dos carriles de aparcamientos que en su día fueron habilitados en esta carretera, debido a las pérdidas económicas que estaban, y están, sufriendo los empresarios por las obras de la playa.

En aquel momento, desde el gobierno capitalino se aseguró públicamente que "los informes son claros a la hora de señalar que, en caso de producirse una situación de emergencia, el tiempo de respuesta se vería afectado por falta de fluidez en el tráfico. Para evitar cualquier incidente, hemos decidido primar la seguridad y actuar de inmediato recuperando un carril adicional para el tráfico".

Sin embargo, y a pesar de que las circunstancias de la vía como el tamaño de los vehículos de emergencias no se han visto modificados, tal justificación no es suficiente y ahora el ayuntamiento capitalino entiende que debe prevalecer la ejecución de las obras por encima de la seguridad, manteniendo el doble sentido de la avenida con solamente dos carriles.