El sindicato Manos Limpias se personará en las diferentes causas judiciales abiertas en Tazacorte y en las que están imputados excargos públicos, según informó ayer a EL DÍA su secretario general y líder, Miguel Bernad.

"La acusación popular es necesaria en este caso para la limpieza de la corrupción en Tazacorte", señaló Bernad, quien informó de que "hemos recibido toda la documentación de lo que está ocurriendo y durante la próxima semana nos reuniremos con nuestros abogados para tratar de que los procedimientos se aceleren y que se aclaren las responsabilidades".

El representante de Manos Limpias afirma que se personarán en el caso de Los Tarajales, en el que se investiga un presunto delito de prevaricación y ordenación del territorio por la construcción de un edificio en suelo afectado por la Ley de Costas; La Nao, con sentencia del Tribunal Supremo que confirma "desvío de poder" a la hora de declarar un suelo como urbanizable; y El Pozo, en el que también se cuestiona su clasificación urbanística.

También se ha interesado por el aprovechamiento del agua que emana de la Caldera de Taburiente, y que explotan, en gran parte, las Haciendas de Argual y Tazacorte, aunque en este caso tan solo a título informativo.

Los tres "casos" abiertos afectan al desarrollo residencial y, sobre todo, turístico del Puerto de Tazacorte. La parte denunciante incluye diferentes sociedades del empresario vasco César Gil, que no pudo desarrollar sus proyectos en la zona, de lo que acusa abiertamente al gobierno de Unión Bagañeta-Coalición Canaria y a los "caciques (así los define) del Valle de Aridane.

Miguel Bernad, abogado y expolítico ultraderechista español, considera que son causas judiciales "que llevan muchos años esperando por culpables y que necesitan de nuestra intervención. Hay, en algunos casos, sentencias firmes del Tribunal Supremo y no hay nadie condenado. A veces existen extraños intereses ocultos entre fiscal y jueces que hacen necesaria la intervención de la acusación popular para que todo se aclare".