Anselmo Pestana asume la Presidencia del Patronato de la Caldera de Taburiente siendo consciente de que "es una de las joyas de la corona de la Isla", a la que acuden miles de turistas cada año y que el Cabildo de La Palma aspira a gestionar en un futuro cercano "porque sería lo más lógico".

Pestana entiende que lo principal para el mantenimiento del Parque Nacional "es recuperar la capacidad económica" para el desarrollo de actividades de conservación y divulgación, advirtiendo de que el Gobierno de Canarias se ha comprometido a invertir en estos espacios naturales de primer orden todo el dinero que para ello le transfiere Madrid, sin desviarlo a otros menesteres.

Otra vía de ingresos que se ha planteado para hacer rentables los Parques Nacionales es cobrar a sus visitantes. A propósito, Pestana considera que "sería bueno obtener recursos que se puedan distribuir entre aquellos municipios limítrofes con la Caldera de Taburiente, además de destinarlos al propio parque".

Sin embargo, no cree en la filosofía de "cobrar por cobrar", es decir, reclamar dinero por tan solo disfrutar sin más de la belleza del espacio natural, sino que es más partidario de "organizar y ofrecer diferentes servicios, como, por ejemplo, rutas guiadas por la Caldera, por las que se pueda cobrar a los turistas, lo que no es novedoso porque ya se hace en otros parques nacionales y los visitantes salen satisfechos".