El punto "negro" (donde más incidentes se registran) de la red viaria de La Palma, el cruce del Molino en Breña Alta, ha sido objeto de debate durante al menos los últimos doce años. Se han puesto diferentes proyectos sobre la mesa, con las alternativas técnicas más variadas, pero nunca se ha hecho obra alguna. O casi. Ahora, el área insular de Infraestructuras presenta la solución más barata de las conocidas, con un proyecto elaborado por un técnico de la casa y con un presupuesto que no llega ni al 15% de lo que inicialmente se planteó.

El anterior plan de obra se presentó en 2002. Con Gerardo Hernández al frente de Infraestructuras, se expuso un proyecto de 14 millones de euros que afectaba a 2.769 metros de vía, con una primera fase de 4,7 millones para precisamente el cruce del Molino. Se quería construir un puente para los vehículos que circulan por la Grama en dirección San Pedro.

Doce años después, el punto más conflictivo de la carretera de la Isla, donde se han llegado a contabilizar una veintena de accidentes en un mes, sigue presentando la misma peligrosidad que a principios de siglo, obligando a los vehículos a cruzar los dos sentidos de circulación para tomar la salida a la izquierda. Para complicar aún más la maniobra, todo se produce en un tramo muy cercano a la salida de una curva, por la que aparecen los vehículos que bajan desde Buenavista.

Jorge González, el nuevo responsable del área, acompañado por el presidente, Anselmo Pestana, se presentó ayer (finales de 2014) ante los medios para enseñar el proyecto elaborado para solucionar el punto negro. Cuesta 600.000 euros y la solución que ofrece es modificar la circulación del cruce, de tal forma que los dos carriles principales se utilicen (solo en esa zona) para ir en sentido La Grama-Buenavista, mientras que los vehículos que ven en dirección Santa Cruz deberán rodear la "raqueta" existente. Todo al mismo nivel.

¿Se dará mayor seguridad? Sí, al facilitar la incorporación de los vehículos a la carretera en dirección a San Pedro. ¿Es la solución idónea? No, con pasarela la peligrosidad se reduce casi a cero. Es una respuesta técnica aceptable porque reduce los riesgos y, sobre todo, la más barata, la que se ajusta a la crisis que sirve de disculpa.