La Consejería de Transportes del Cabildo de La Palma se encuentra en avanzadas negociaciones con los concesionarios del restaurante Casa Indianos, para convertir la primera planta de esta edificación en la estación de guaguas de la capital, al menos de forma provisional, según confirmaron ayer a esta redacción fuentes vinculadas al proyecto.

La idea es que el negocio de hostelería, que rinde homenaje con su nombre a una de las fiestas más queridas por los ciudadanos en la capital, traslade su comedor a la parte alta de la casona, donde dispone de un amplio espacio que habitualmente es utilizado tanto para celebraciones y reuniones como incluso para los ensayos de agrupaciones musicales.

En la primera planta, de cerrarse las conversaciones para fijar el pago mensual de un alquiler, se mantendría el servicio de cafetería ahora en funcionamiento, aunque en esta caso tendría por objeto atender a los usuarios del transporte regular de guaguas, además de los vestuarios.

Esta iniciativa, tan curiosa como acertada, no precisa de una gran inversión, lo que se agradece en tiempos de crisis económica. Al contrario, el salón que ahora se utiliza como comedor está rehabilitado, su aspecto es impecable, por lo que tan solo se necesitará sustituir las mesas y sillas de restauración por mobiliario adaptado a su nuevo cometido, incluyendo paneles de información tanto en el interior como en el exterior del inmueble.

La casona es propiedad de la Autoridad Portuaria de Santa Cruz de Tenerife, aunque la concesión para su gestión la tiene una empresa privada. Puertos, que ya conoce las conversaciones abiertas, ha expresado su conformidad a la iniciativa. También está de acuerdo con el proyecto tanto el Ayuntamiento de Santa Cruz de La Palma como la cooperativa Transporte Insular, que se encarga de cubrir las rutas.

Lo curioso es que las guaguas del transporte regular de viajeros que salen de la capital con dirección Sur ya tienen su zona habitual de estacionamiento a las puertas de Casa Indianos, aunque los pasajeros se ven obligados a esperar la guagua en bancos de cemento o bajo simples marquesinas, insuficientes para el elevado número de usuarios que se concentran en la zona, especialmente en hora punta, que acaban ocupando la acera y un pequeño espacio verde. Además, a los que esperan la guagua no se les ofrece ni tan siquiera un simple baño donde poder hacer sus necesidades.

Esta medida no supone que Santa Cruz de La Palma renuncie al proyecto de una gran estación en la salida por el Sur de la ciudad, pero desde el área insular de Transportes se ha expresado públicamente en diferentes ocasiones que en estos momentos se trata de un proyecto inviable por su elevado coste: unos nueve millones de euros.

Lo proyectado cuenta con un edificio central de seis plantas y un sótano en una parcela de 9.400 metros cuadrados, situada junto al túnel de la Portada, con capacidad para 18 guaguas y con un aparcamiento para 852 coches. Es decir, un macro diseño de cuando había dinero para casi todo. Parte del suelo se usa en ocasiones como estacionamientos provisionales.