El fuerte oleaje obligó a la evacuación ayer por la tarde de al menos tres viviendas en la zona de Maldonado, en Santa Cruz de La Palma, después de que el mar llegara incluso a entrar dentro de las propias casas sin registrar daños personales. Los afectados se realojaron en pisos de sus familiares.

Trabajadores del ayuntamiento se encargaron además de tapiar puertas y ventanas de las viviendas más cercanas al mar, con el objeto de protegerlas. Un vehículo que hasta hace poco tiempo servía de alojamiento a un sin techo (según él mismo reconoció) fue volteado en varias ocasiones por las olas.

De igual forma, el fuerte oleaje hizo que antes de las 19.30 horas se procediera al cierre de la avenida Maritina.