El Servicio de Apoyo y Respiro Familiar (SAR) que financia el Cabildo de La Palma, a través de la Consejería de Asunto Sociales y gestiona la Plataforma Palmera de Atención Integral a la Discapacidad (Indispal), ha concluido su tradicional ciclo de verano (julio y agosto), del que este año han sido beneficiarios 27 niños y jóvenes de entre 3 y 21 años con discapacidad, así como sus familias.

El pasado lunes tuvo lugar un encuentro en el Refugio de El Pilar, en el que se dieron cita los beneficiarios y los familiares de este servicio, que se ha prestado en las comarcas este y oeste de la Isla.

La consejera de Asuntos Sociales, Jovita Monterrey, se ha mostrado muy satisfecha con el desarrollo y los resultados de este servicio y, en este sentido, ha explicado que el Servicio de Apoyo y Respiro Familiar se consolida como "un recurso en el que los beneficiaros reciben atención básica, pero también trabajan en habilidades ocupacionales desarrollando una importante y necesaria vertiente lúdica y de integración sociocultural en los diferentes talleres que se celebran cada día".