La Palma cuenta con mil kilómetros de senderos balizados y señalizados, que llevan al caminante a rincones de una belleza natural única, pero tan solo dispone de un refugio de montaña, en la Punta de los Roques, en las cresterías de la Caldera de Taburiente, en el que pernoctar es gratuito y depende exclusivamente de que hayan plazas libres. Llegar y quedarse, sin reservas previas.
Para llegar al refugio se puede partir tanto del área recreativa del Pilar como de la ermita del Pino de la Virgen, Incluso se llega iniciando el trayecto desde la capital palmera. En sentido inverso, desde el Pico de la Nieve. Para disfrutar, siempre que la climatología acompañe, de unas espectaculares vistas sobre la comarca del Este y también del Valle de Aridane, la mejor opción es iniciar el recorrido desde la pista de la Hilera, cerca del Pilar, que "parte" a La Palma en dos mitades. El caminante podrá disfrutar a un lado del camino de los paisajes de las Breñas o Santa Cruz de La Palma y al otro, de El Paso o Los Llanos de Aridane.
Son poco más de 6 kilómetros, sin ninguna dificultad técnica (es una pista, aunque también ofrece la opción de ir por un sendero) y con apenas unos mínimos repechos cortos y accesibles incluso para senderistas sin experiencia. Al final de la Hilera se "funden" tres senderos. Uno de ellos (PR LP 1) conecta con la ermita del Pino de la Virgen por tramos empedrados, otro ofrece la posibilidad de bajar a la parte alta de la capital y, por último, de frente (GR131), marcha en busca de la Punta de los Roques.
La subida hasta el refugio son otros 6 kilómetros, siempre por los bordes de la impresionante Caldera de Taburiente. Los cuatro primeros son de pendiente. Es una ascensión que lleva a paisajes que permanecen en la retina durante largo tiempo. El sendero no presenta ningún peligro y el esfuerzo necesario por el desnivel se ve recompensado. El senderista pasará por los Roques de la Perra, el pico de la Ovejas o el pico de Corralejo.
Arriba, a 2.040 metros de altura, se encuentra el refugio de la Punta de los Roques. Es un buen lugar para descansar. Sin lujos, como la montaña exige. Dispone de una habitación como sala de estar, con dos mesas. Al fondo, un dormitorio con cuatro literas, siendo necesario llevar sacos de dormir. Oficialmente pueden dormir 20 personas. No cuenta con servicios ni tampoco con agua potable o, para ser más exactos, no está tratada. En realidad cuenta con un aljibe de agua de lluvia.
La utilización del refugio de Punta de los Roques es ideal para aquellos aventureros que al día siguiente decidan seguir el sendero en busca del Roque de los Muchachos, la cima de La Palma, pasando primero por el Pico de la Nieve y el Pico de la Cruz.