Mercedes Coello asume el reto de mejorar la sanidad en la Isla. La responsable de los Servicios Sanitarios ha logrado, con sus decisiones, reducir las listas de espera en el Hospital General, pero evita los paños calientes y reconoce que hay pruebas, también tratamientos, que nunca se podrán ofertar en La Palma, lo que obliga a las derivaciones. Apoya la reclamación de Los Llanos de Aridane de tener un nuevo aparato de rayos y, a la vez, no cree necesario que las urgencias en el Noroeste sean presenciales.

Las listas de espera se están reduciendo. ¿Eso es verdad o el papel aguanta todo lo que le pongan?

Es absolutamente cierto. Está medido y tasado. Son datos oficiales que se pueden ver en la página del Servicio Canario de Salud. Y no solo se está bajando la lista de espera quirúrgica sino también la de consultas. Se han tomado decisiones que han sido importantes, pero yo destacaría sobre todo el compromiso de todo el personal.

Cada vez que desvían pacientes de La Palma a Tenerife, ¿se reconoce que algo falla en la sanidad de la Isla?

No, no falla nada. Tenemos los quirófanos que tenemos y están llenos a tope. Los abrimos también por las tardes para atender a los pacientes. Cuando se desvían es porque no damos abasto. Se suelen desviar operaciones que pueden esperar, como por ejemplo las prótesis de rodilla o de cadera. Este año de momento no hemos desviado a pacientes; los que quedan son acumulados de años anteriores. Además, aquí hay cosas que no operamos, como neurocirugía o vascular, y esos casos no hay otra que desviarlos fuera de La Palma.

Peor no solo se desvían para pacientes para operar, sino también para pruebas...

Nos falta equipamiento que por otro lado nunca vamos a tener. Por ejemplo, gammagrafía ósea no vamos a tener porque no contamos con un radiólogo especialista, ni hacemos radioterapia. Hay tanto tratamientos como pruebas que no vamos a poder tener nunca en La Palma y que tampoco conviene tenerlos desde un punto de vista de coste-efectividad.

¿Qué opinión le merece que en el Noroeste las urgencias no sean presenciales sino que haya que llamar a un móvil para localizar al facultativo?

Desde el punto de vista político es factible que haya médicos presenciales, pero desde el punto de vista sanitario no es necesario. Los números cantan y la realidad es que no hay suficientes urgencias para generar un médico de presencia física. Además, le digo una cosa: los médicos están en realidad de presencia física. A ellos se les paga hasta las nueve de la noche de presencia en el centro de salud y a partir de las nueve en adelante, de presencia localizada. Ninguno de ellos vive en Tijarafe ni en Garafía, de manera que normalmente están en el centro de salud. Lo que ocurre es que no se le paga porque no hay dinero. Si pudiéramos, se lo pagaríamos. No lo dude. Se ha convertido más en un requerimiento laboral que sanitario. La próxima semana nos reuniremos con ellos.

El centro de salud de Los Llanos necesita un aparato de rayos X y el hospital precisa de uno para resonancias magnéticas. ¿Para cuándo?

El aparato para resonancias magnéticas debe estar recogido en los presupuestos de 2017 de la Consejería de Sanidad, ese es el compromiso del consejero, y lo de Los Llanos es ultranecesario y tanto desde los servicios económicos como de programas asistenciales están trabajando en dar una respuesta probablemente este mismo año.

Una socialista nombra nueva directora de Atención Primaria de La Palma a una exconsejera insular del PP, Nieves Rosa Arroyo. Suena raro, ¿no?

Una cosa es la política y otra la sanidad...

¡Eh!, pero es un puesto de designación directa.

Uno puede tener unas inquietudes de participar en la política, de trabajar para la gente, y creo que ella vio la oportunidad de hacerlo en el PP y no dijo que no. Nunca la he visto como una persona de derechas; al contrario, siempre me ha parecido una persona progresista y realmente creo que lo es. Nunca se quiso afiliar al PP. De todas formas, yo la conozco desde que fuimos compañeras en la facultad y Nieves Rosa siempre ha creído en la sanidad pública, es una persona tremendamente apegada a sus pacientes, una gran profesional que cree en lo social. Con una mentalidad abierta, como debe ser, es sencillo entender la decisión.