El responsable de Economía y Hacienda en el Ayuntamiento de Los Llanos de Aridane, Mariano Hernández, ha reconocido en sesión plenaria que "no tiene constancia" de que las arcas municipales estén ingresando el canon por la explotación privada del único aparcamiento subterráneo de la ciudad, ubicado en los bajos de la plaza Juan Pablo II, un canon que Izquierda Unida Canaria cifró en más de 38.700 euros cada año.

El portavoz de IUC, Felipe Ramos, aprovechó el apartado de ruegos y preguntas para exponer que en la cláusula cuarta del contrato firmado entre el ayuntamiento y la empresa adjudicataria del parquin en 2003, se señala que el canon anual ofertado asciende a la cantidad 120,20 euros por plaza de aparcamiento construida, "que tendrá efecto desde el día 1 de enero de 2005 y deberá ser satisfecho por el concesionario dentro del primer trimestre siguiente a cada vencimiento, siendo revisable desde el 1 de enero de 2006 en función de IPC".

El subterráneo cuenta con 322 plazas, por lo que sin tener en cuenta la aplicación del IPC la empresa adjudicataria debía pagar al ayuntamiento durante los últimos 11 años más de 425.000 euros.

Felipe Ramos preguntó inicialmente por cómo se encontraban esos ingresos "porque no están contabilizados en los ingresos previstos para 2016", dentro del presupuesto ya aprobado. Mariano Hernández informó al edil de IUC de que "solicitaremos toda la documentación" para que la respuesta fuese lo más concreta posible. El concejal opositor resumió aún más su pregunta en su segunda intervención: "¿Pero se está cobrando?", a lo que el responsable de Economía y Hacienda respondió con un "no tengo constancia", una frase que también ha sido repetida por otras fuentes municipales consultadas durante los últimos días por EL DÍA, que sostienen que nunca se pagó el canon.

El portavoz del PP, que en realidad cuando el citado acuerdo fue firmado en 2003, con la mayoría absoluta de Coalición Canaria en el ayuntamiento, ni tan siquiera estaba en política (tenía apenas 21 años), dejó entrever que sí tenía constancia de que no se había cobrado la licencia de apertura del subterráneo, hace apenas unos meses.

El ayuntamiento tampoco tendría ahora la posibilidad de reclamar a la empresa implicada la totalidad de la deuda, tan "solo", que no es poco, los casi 200.000 euros de canon correspondientes a los últimos cinco años.

Sin embargo, la historia del parquin no es tan sencilla de contar. Fue una obra con demasiados entresijos. La actuación la comenzó la empresa Fuente Olén SL, inicial adjudicataria, pero esta entidad se ahogó económicamente y para poder sacar adelante el subterráneo que también estaba construyendo en la avenida de El Puente de Santa Cruz de La Palma, vendió los aparcamientos en los bajos de la plaza Juan Pablo II a la empresa local Dos Tumbos SL., que asumió, como no podía ser de otra manera, las condiciones previamente firmadas en la concesión.

El ayuntamiento recibió parcialmente la obra en octubre de 2008 y en abril de 2009 se terminó.