El grupo de gobierno (PP) en el Ayuntamiento de Los Llanos de Aridane ha decidido rescindir el contrato a la empresa que gestiona las dos oficinas de turismo del municipio, en la avenida Doctor Fleming, en el casco urbano; y en el núcleo costero de Puerto de Naos, al supuestamente incumplir cláusulas esenciales del contrato de adjudicación.

En el decreto de la alcaldesa, Noelia García, que cuenta con el dictamen favorable del Consejo Consultivo de Canarias, se exponen incumplimientos como que el personal no está lo suficientemente formado al no hablar los tres idiomas requeridos: español, inglés y alemán, para atender adecuadamente a los usuarios; hay deficiencias en la limpieza de las oficinas y el contratista no cuenta con los medios técnicos necesarios para prestar el servicio. Falta material de apoyo y los folletos con los que dispone la oficina y que están puestos a disposición de los turistas son limitados e insuficientes.

En el informe municipal de la técnico responsable del contrato, se refleja también que la adjudicataria "ha venido incumpliendo reiteradamente el horario de apertura de las oficinas", a pesar de ser uno de los criterios que se tuvo en cuenta a la hora de ser la empresa sobre la que recayera la adjudicación.

La empresa ha alegado ante el ayuntamiento que no ha tenido constancia por parte de los usuarios del centro "de ninguna queja. Nuestros trabajadores se encuentran realizando su labor diariamente sin ningún tipo de incidencias ni complicaciones en la realización del servicio". Por contra, la responsable del contrato respondió que ante la corporación local sí se han presentado tanto de forma verbal como por escrito "muchas quejas", que se han comprobado como ciertas.

A los supuestos incumplimientos de cláusulas esenciales del contrato, se une además, como un hecho grave, la queja del comercial de una empresa de excursiones marítimas, quien asegura que cuando fue a informar a uno de los trabajadores de las oficinas de turismo sobre la actividad que su entidad desarrolla, a efectos de que pudiera trasladar la información a los turistas, "nos confiesa que otra empresa, nuestra competencia, les paga una comisión por recomendar sus excursiones y no las nuestras".

El contrato del servicio de las oficinas de turismo se adjudicó por un precio de 158.362 euros, más 11.085 de IGIC, con una duración de cuatro años. El decreto de adjudicación de la alcaldesa es de 18 de diciembre de 2015. Desde el principio, desde que se abrió, hubo problemas, circulando por diferentes medios una grabación donde se demostraba que la persona que cubría el servicio apenas sabía español.

En los primeros tres meses de trabajo, la adjudicataria ya contaba con dos expedientes por incumplir el acuerdo con el ayuntamiento, con una sanción económica de escasa cuantía. La situación no mejoró, al contrario, fue empeorando hasta llegar a la rescisión del contrato, que deberá ser comunicada por el ayuntamiento a la empresa interesada.