Los supuestos acosos laborales en el Ayuntamiento de Santa Cruz de La Palma no se reducen exclusivamente a un policía local, que a través del sindicato al que pertenece dio a conocer públicamente su demanda contra su jefe y el alcalde, sino que, al contrario, en los últimos seis meses se han presentado al menos cuatro demandas por la vía judicial por vulneración reiterada de derechos fundamentales en la corporación capitalina, según ha podido conocer EL DÍA de fuentes ligadas a los litigios.
Uno de los procedimientos se ha tramitado a través del Juzgado de lo Penal número 1 de Santa Cruz de Tenerife, lo que implica que el supuesto delito puede conllevar una petición de cárcel y no tan solo el reconocimiento de un derecho o su efectividad. Se presentó por esta vía atendiendo a la gravedad que la acusación entiende que tienen los hechos objeto de la causa.
Otra de las denuncias está siendo tramitada por la vía de lo Contencioso, después de que la trabajadora municipal haya sufrido un "acoso laboral continuado y grave", según se entiende desde la acusación, llegando hasta el punto de que le retiraron su ordenador y el teléfono de su puesto de trabajo. Ha tenido que presentar una baja al entender su facultativo que no se encuentra en condiciones de salud para desempeñar su labor.
Las otras dos demandas pertenecen a sendos policías locales, y fueron tramitadas a través de la jurisdicción laboral. Uno de ellos dio a conocer esta misma semana su situación, en una denuncia donde se advierte de que ha existido "una clara y grave presión laboral sostenida en el tiempo, con la intención de amedrentar e intimidar al agente a través del menoscabo de su dignidad moral". Dice haber sido objeto de frases amenazantes como "te estoy acechando" o "vas a caer". El propio ayuntamiento estudia internamente lo ocurrido para depurar, en su caso, responsabilidades.
La segunda de las demandas en el Cuerpo pertenece a un oficial, quien previamente, en concreto durante el pasado mes de julio, alertó de la situación que estaba viviendo a Inspección de Trabajo, antes de autorizar a su abogado a tramitar durante estos días su demanda por la vía judicial. En la misma se acusa al jefe de la Policía Local de acoso laboral también mantenido en el tiempo (durante años).
El demandante sostiene haber sido objeto de presión psicológica, estrés e incluso haber sufrido depresión, llegando a darse de baja médica por estos motivos de su puesto de trabajo.
Los casos que se recogen en la información, y de los que habrá que esperar a las resoluciones judiciales pertinentes para corroborar la veracidad de las denuncias, son tan solo aquellos que lleva un mismo abogado, sin descartar la posibilidad de que incluso hayan más casos de similar relevancia en manos de otros letrados.