Agentes de la Guardia Civil se presentaron el pasado miércoles, sobre las once y media de la noche, en un bingo clandestino que opera en el municipio de Tazacorte, identificando, entre los asistentes, al primer teniente de alcalde, el nacionalista Adolfo Pérez, como una de las personas responsables o, al menos, la que se encontraba en la zona de recaudación en el momento de la intervención.

Una treintena de personas estaban en el interior del local de juego, cerca de la gasolinera del pueblo, cuando los agentes accedieron a las instalaciones, identificando a los presentes y ordenando el cierre del negocio, según relataron a EL DÍA diferentes fuentes presenciales, incautando la totalidad del dinero recaudado.

El bingo clandestino es supuestamente sin ánimo de lucro y en principio se abre para cubrir una parte importante de los gastos del equipo de fútbol de Tazacorte, en el que Adolfo Pérez, quien fuera consejero insular de Deportes por CC, ha participado activamente como directivo. Es un dinero que no se declara, por lo que se trata de un supuesto delito fiscal.

En el año 2009, el Servicio de Inspección de Juego y Apuestas del Gobierno de Canarias y la Guardia Civil ya precintaron este salón de juego, que llevaba 25 años operando, y lo desmantelaron tras confiscar diversos materiales, entre los que se encontraba un dispositivo de vídeo y monitores y un equipo de megafonía, además de 530 cartones sobre tablillas preparados para las apuestas y la cantidad de 458 euros procedentes del juego.

En aquella ocasión se comprobó que existía una intensa actividad hasta la medianoche en días laborables y festivos, con una afluencia importante de apostantes. El cartón se jugaba en aquella época a 10 céntimos la línea y 20 el relleno, con apuestas especiales los domingos que llegaban a dos euros. La denuncia por competencia ilegal partió de un bingo autorizado ubicado en Los Llanos de Aridane.