La Palma cuenta con apenas 7.824 camas en instalaciones turísticas legales, lo que supone un descenso de más de 600 plazas (en concreto 624) con respecto a 2010, según los datos oficiales de Promotur, entidad responsable de la promoción de la marca destino Islas Canarias, que en su web publica una serie de los últimos siete años de la oferta en el Archipiélago.

Es cierto que en La Palma hay otras 3.000 o 4.000 camas alegales, pero también estaban operando en mayor o menor medida en 2010, y es verdad que antaño se olvidó el sector terciario para apostar por la agricultura, pero con toda la información en la mano es más sencillo entender (y explicar) las razones reales por las que recientemente ha tenido, por ejemplo, que dormir un grupo de visitantes franceses en la residencia militar de El Fuerte o por qué esta misma semana el Grupo Primera tuvo que compartir con Fuerteventura los turistas de un vuelo de Dinamarca que en principio eran exclusivamente para La Palma.

Un dato: las plazas alojativas hoteleras sí han aumentado. En concreto, en 2016 había 4.325 camas, mientras la cifra en 2010 era de 4.249. Con esa estadística, y sin nuevas aperturas a lo largo de 2017, se obtiene que La Palma apenas posee el 1,8% de estas camas que existen en Canarias. Por el contrario, en plazas extrahoteleras el descenso es significativo, pasando de 4.199 hace siete años a 3.499 en 2016, que representan un 2,1% del total en el Archipiélago.

Esta realidad deja al descubierto las dificultades sobre todo de tipo urbanístico, de seguridad jurídica para los inversores, que a lo largo de los años han existido en el territorio insular y el efecto, también, de la crisis económica en las instalaciones menos potentes que han acabado cerrando sin poder aguardar a los años de bonanza. Pero, además, desmonta el argumento en muchas ocasiones manido de que la Isla se ha abierto al turismo del cemento.

Es más, la oferta que maneja La Palma está bastante más cerca de la que tiene La Gomera que de la de cualquier otra isla, siempre tomando como referencia la información de Promotur. La Isla Colombina alcanza las 5.128 camas. Ya hacer una comparación con las islas consolidadas en Canarias en el sector turístico, y sin tener en cuenta las capitalinas, resulta claramente desproporcionado. Y es que Lanzarote tiene 72.026 camas, y Fuerteventura, 62.503, por lo que a pesar de haber también perdido plazas durante los últimos años contaban con un músculo hotelero más que significativo.

Analizando con más detalle la información oficial, se obtiene que La Palma cuenta con 27 establecimientos hoteleros, la mayoría (23) de entre 1 y 3 estrellas. En Lanzarote y Fuerteventura, sin tener en cuenta que duplican o incluso triplican esa cifra, a las que tampoco quieren llegar ni los ciudadanos ni las instituciones públicas, se ha apostado más por hoteles de 4 y 5 estrellas, que en ambas islas superan a los de menor nivel. Es decir, no es solo la cantidad (que sería hasta lógico) sino también la calidad de los complejos.

Comprar el Marítimo

Santa Cruz de La Palma mantiene la esperanza de volver a contar con el hotel Marítimo, cerrado en 2010 por sentencia judicial tras el impago de un crédito hipotecario. A propósito, el periódico digital decano en la Isla, el apuron.com, ha informado de que empresarios sevillanos ultiman un acuerdo con su propietario, la entidad bancaria La Caixa, para su adquisición, reforma y apertura. Los interesados cuentan con experiencia en el sector, al disponer de otras instalaciones turísticas. A lo largo de los años, otros grupos empresariales se interesaron por esta instalación, aunque al final el interés no se vio reflejado en una compra, sobre todo por el estado del edificio (necesita mejoras importantes) y la obligatoriedad de hacer adaptaciones para poder abrirlo. A su favor, la inminente apertura de la playa multiplica su valor.