El Ayuntamiento de Santa Cruz de La Palma ha decidido impedir el acceso a la antigua casa de los maestros ubicada junto al colegio José Pérez Vidal (Sector Norte), precintando la entrada debido a los desprendimientos que se están produciendo en el inmueble, donde ya no reside ninguna persona aunque uno de los locales de la primera planta es utilizado habitualmente por los vecinos que se encargar de elaborar los tradicionales mayos de la Fiesta de la Cruz.

La realidad es que la imagen exterior del inmueble es bastante lamentable. No es que sea un edificio antiguo, más bien se trata de una construcción vieja que desde hace muchísimos años reclama una intervención integral. Tan solo hace falta observar los balcones y las cornisas para darse cuenta de que el cualquier momento de pueden producir desprendimientos.

De todas formas, "los técnicos nos dicen que la estructura del edificio está bien", informó a esta redacción el concejal de Infraestructuras, Manuel Abrante, quien confirmó lo evidente "hay una cornisa peligrosa (se puede caer) y por seguridad se decidió impedir el acceso al inmueble". Espera que durante la próxima semana, "si no hay contratiempos", se pueda "comenzar con la obra" para evitar desprendimientos.

Por su parte, el alcalde, Sergio Matos, explicó que además de realizar la obra más urgente, "tenemos que plantearnos si es más rentable realizar una rehabilitación del edificio para poder utilizarlo con todas las garantías de seguridad, para lo que habría que lograr una financiación considerable, o, por el contrario, se estima que lo mejor es derruirlo y hacer allí, en ese terreno, lo que se crea mejor para el municipio".

Al ser cuestionado por qué ocurrirá con el colectivo vecinal que tiene en una de los espacios del edificio los materiales para la elaboración de los mayos, el regidor local dijo que "estamos buscando una solución, que puede pasar por encontrar un local que esté libre por la zona".