Samara Bermúdez ha buscado una alternativa habitacional que ha planteado al ayuntamiento: "Es un local que me prestan. No es grande, pero es un techo y si el ayuntamiento me ayuda a acondicionarlo sería una opción, quizás la única que me quede". La realidad es que se trata de un local "sin agua ni luz", admite la afectada, "pero si ellos (la corporación local) me ayudan, podría tener algo provisional". Espera "que el ayuntamiento acepte" esta posibilidad "y nos ayude". Se trata de poner los servicios básicos, algunos tabiques, "para tener donde vivir hasta que me toque una vivienda" de protección oficial. Desde el ayuntamiento tampoco han querido valorar a esta redacción la oferta planteada por la joven. De igual forma, Bermúdez confirma que se puso en contacto con Provivienda, que ofrece sus servicios a propietarios de casas y a familias interesadas en alquilar a precios asequibles y con garantías, "pero me dijeron que no podía acceder a los pisos porque con la PCI y los miembros de la unidad familiar, no me daba. Tenía que ser un alquiler muy barato y no había".