El alcalde de Fuencaliente, Luis Román Torres, es un malabarista de la política. Nadie ha sabido sacar tanto provecho a 150 votos, los que logró en las pasadas elecciones, y su estrategia es seguir moviendo hilos para mantenerse en el gobierno hasta el final de la legislatura. Y tiene mérito.

A finales de junio debe ceder el bastón de mando a la portavoz de Unión Progresista de Fuencaliente, Nieves María Rodríguez, en virtud del pacto firmado a principio de mandato, pero son pocos en el pueblo los que creen que se cumplirá con el acuerdo. El mensaje que manda el alcalde varía en función de su interlocutor.

El pasado lunes, en una reunión que PSOE y UPF mantuvieron con Sí se Puede, con el objeto de analizar lo que resta de mandato, Torres dejó claro que iba a mantener "sí o sí" el acuerdo actual y que cedería la Alcaldía a Nieves María Rodríguez, quien, por cierto, se ha mantenido bastante alejada de los medios de comunicación, aunque siendo consciente de la realidad que se cuece a su alrededor.

Ese mismo día, el pasado lunes, hubo un encuentro a nivel insular entre PSOE y CC para clarificar el cambio de Alcaldía en Tijarafe, tal y como ocurrió el pasado sábado, y para analizar el incumplimiento socialista en Fuencaliente o, para ser más exacto, la actitud de Luis Román Torres. El PSOE asumió el compromiso de intentar convencer al alcalde para que rompiera los acuerdos con UPF, produciéndose incluso filtraciones a través de medios de comunicación.

Torres, sin embargo, va por libre y su objetivo es asegurar su presencia en el gobierno municipal. La semana pasada mantuvo un contacto con dirigentes locales de CC, con los que se ha mostrado de forma ambigua en el último mes. Eso sí, les garantizó un pacto y pidió a los nacionalistas un par de meses más de Alcaldía hasta solucionar su situación laboral. En cinco días fuere capaz de asegurar a UPF y SSP que iba a mantener el pacto y, a la vez, prometer a CC que lo rompería. Un "fenómeno".

Hay, sin embargo, una situación que no puede controlar al no depender de su estrategia y que quizás ni tan siquiera se llegue a desvelar hasta la sesión plenaria para el nombramiento del nuevo o del mismo alcalde: un pacto entre Coalición Canaria y SsP. Un acuerdo en el que el concejal Eduardo Pérez no tendría la obligación de entrar en el ejecutivo municipal, sino intentar marcar estrategias. ¿Saben?, en el Sur todo es posible.