El letrado de la plataforma de vecinos que se opone a la instalación de plantas de asfalto en el polígono industrial del Callejón de la Gata, Felipe Campos, ha recomendado al Ayuntamiento de Los Llanos de Aridane, en una reunión con los diferentes grupos políticos, que anule la licencia concedida a la empresa Unaspa para la puesta en marcha de una industria de este tipo, ya que a su juicio lo ampara la ley.
El Tribunal Superior de Justicia de Canarias (TSJC) falló a favor de Unaspa en contra del precinto de su planta, a un centenar de metros de que la que Ruiz Romero tuvo que desmontar, una resolución judicial que obedece sencillamente a un error del propio gobierno municipal, que en el año 2013 optó por el silencio administrativo ante la reclamación de la empresa, una opción que en el caso de las actividades clasificadas es favorable al recurrente.
Felipe Campos explicó a EL DÍA que "el juzgado no tiene más remedio que darle la licencia a Unaspa, pero en la propia sentencia le dice al ayuntamiento que la anule". A propósito, el juez deja claro que "la administración pública tiene unas funciones que cumplir, entre ellas la de controlar las actividades clasificadas. La jurisdicción no le puede sustituir directamente sin que previamente se haya dado la oportunidad de desempeñarlas resolviendo el conflicto y evitando la judicialización del ejercicio de las competencias administrativas (con excepciones que no son del caso)".
El abogado de los vecinos hace especial hincapié en que el TSJC "ya se ha pronunciado sobre que en el polígono industrial del Callejón de la Gata ya no caben plantas de asfalto, ni la planteada por Ruiz Romero ni la proyectada por Unaspa", añadiendo que "el ayuntamiento se equivocó en su momento, no resolvió en plazo y eso al final ha provocado que la empresa ha obtenido por silencio administrativo una licencia ilegal, contra ley, que debe ser anulada".
En la misma línea, Campos defiende que "el juez dice en primer lugar que no cabe el silencio administrativo negativo en estos casos y que debe anular la licencia, y le advierte de que se equivocó porque debe resolver en plazo", por ello "le hemos recomendado al ayuntamiento que inicie el procedimiento para anular la licencia directamente porque con la ley en la mano, en el Callejón de la Gata no caben plantas de asfalto".
El letrado reconoce que la decisión del ayuntamiento de no responder en su momento a Unaspa "no tiene explicación. La ley de actividades clasificadas de aplicación dice claramente que tenía que haber resuelto en dos meses y que el silencio administrativo sería positivo (a la concesión de la licencia). Fue un error y el juzgado no tiene más remedio que darle la licencia, pero la propia sentencia le dice que la anule".