El Ayuntamiento de Santa Cruz de La Palma arrastra una deuda de 13.000 euros con la comunidad de vecinos de las viviendas municipales de Timibúcar, debido a los pisos que mantiene cerrados al no haber sido capaz de dar una solución a las familias que aún residen en el barrio de Mirca y para las que se construyó en 2012 parte de esta promoción.

Esta situación fue denunciada en sesión plenaria por la edil de Nueva Canarias, Maeve Sanjuán, ante el silencio del grupo de gobierno (PSOE-CC). Con anterioridad, el portavoz del Partido Popular, Juan José Cabrera, preguntó por las viviendas que estaban libres en este edificio de propiedad municipal, a lo que el primer teniente de alcalde, el nacionalista Víctor Francisco, dijo que "algunas están libres desde el primer momento por la problemática que hubo durante el proceso de adjudicación".

Francisco, que acabó fijando en "2 ó 3" los pisos sin ocupar, se estaba refiriendo a aquellas familias de Mirca que rechazaron abandonar sus casas para residir en las viviendas que el ayuntamiento les estaba ofreciendo en Timibúcar, una negativa que fundamentaron en las reducidas dimensiones de los alojamientos, a pesar de que el Gobierno de España ejecutó la nueva promoción con el compromiso municipal de derruir los hogares donde viven los vecinos. Esta situación se enquistó y lleva años sin una solución satisfactoria.

Maeve Sanjuán intuye que "los pisos vacíos no son dos ni tres", ya que "la deuda que tiene el ayuntamiento con la comunidad es de 13.000 euros, una cantidad que demuestra que probablemente sean muchas más las viviendas que están vacías".

De todas formas, para la edil de Nueva Canarias lo más importante "no es el dinero que el ayuntamiento debe a la comunidad. El principal problema es que tenemos vecinos y vecinas en esta ciudad que llevan muchos años esperando por una vivienda". A propósito, señaló que "en 2011, último año del que tenemos datos, habían en Santa Cruz de La Palma más de 200 familias que necesitaban una casa".

Sanjuán expuso al grupo de gobierno la necesidad de "ir a Madrid y desatascar el tema de Mirca. Saber si hay que tirar las casas (donde viven los vecinos que rechazan trasladarse a Timibúcar) o si sus actuales viviendas se pueden salvar porque en Santa Cruz de La Palma hay familias que no tienen hogar".

La idea de NC es que el Estado autorice definitivamente que las viviendas de Mirca no tengan que ser derruidas y que sus vecinos puedan mantener su residencia, para que, con ello, el ayuntamiento conceda los pisos que tiene cerrados en Timibúcar a otras familias de la ciudad con necesidades. "La pérdida de población también ocurre por no ofrecer opciones alojativas", sentenció Sanjuán.