Llevaban décadas sin verse. Nacieron allí pero el transcurrir de la vida les llevó por otros caminos. Sus antepasados murieron y, por ello, perdieron el hilo de conexión con el barrio. Aquel encuentro fue una mezcla de recuerdos que perduran para siempre con imágenes que se atrapan en débiles retinas. Ocurrió en 2015.

Franceses es un núcleo rural de siempre. Metido entre enormes barrancos, fue perdiendo colegios, bares, muchas viviendas cerraron... añoraba a su gente y Mauro Castro, de esas personas donde las "locuras" nunca parecen rendirse, decidió crear un encuentro entre vecinos que vivieron años en aquellas calles. Una exposición de fotos antiguas, una comida, una misa. No sabía si iba a ir una familia, seis personas o nadie. Acudieron cerca de 300 antiguos lugareños. Desde una vecina que estaba en Venezuela hasta su hija que reside en Londres. Otros se desplazaron de Tenerife, Gran Canaria o Madrid.

El evento se repitió en 2016. Amenazó con "desbordarse". Un éxito. Y hoy, 28 de octubre, celebra su tercera edición. "Con ver aquí a gente que se marchó hace 50 años ya es suficiente para organizar este encuentro. Hay vecinos que han regresado para estos días a Franceses y están en las que fueron sus casas". Mauro lo cuenta como si le fuera la vida: "Desde hace un mes hay personas que me llaman para preguntarme en qué pueden colaborar, otras te ven por la calle y te quieren dar unos euros para ayudar, te preguntan si hay que comprar los refrescos. ¡Este año ha sido increíble!".

Franceses no quiere vivir solo de los que están. Rechaza olvidar a los que se han ido. A aquellos que recorrieron sus calles como parte de su quehacer diario y que un día fallecieron. Por ello, "el encuentro se celebra en estas fechas, coincidiendo con el puente de Todos los Santos, en homenaje a los que no están entre nosotros". Además, se reconoce la figura de un personaje del pueblo. En 2017 las elegidas son las parteras: Nieves Castro, Agustina Gómez y Sor Josefa, por lo que será un encuentro centrado en los menores.

Van incluso un poco más allá. Franceses ha instaurado un concurso fotográfico en homenaje póstumo a Aldo Basilio Pérez Castro, vecino de Santa Cruz de La Palma y que los fines de semana llevaba al barrio garafiano todo lo novedoso que caía en su mano: la primera televisión, una película de cine, un telescopio. Un certamen en el que participan 222 fotógrafos de 24 países con 410 imágenes sobre la mujer rural. Sí, a lo grande.

Se mantiene la misa, la comida de confraternidad, las actuaciones musicales... y los abrazos que saben que son de verdad.