Nueva Canarias demanda que se declare de emergencias las obras de finalización de la balsa de Vicario, en Tijarafe, cuya construcción se adjudicó en 2010 y que está paralizada.

NC advierte de que "no nos vale que ese retraso se pretenda justificar con el argumento de que es consecuencia de los recortes del Estado" en relación al Convenio de Obras Hidráulicas, puesto que “el Gobierno de Canarias ha tenido margen para incorporar en estos años recursos propios”, como se ha hecho con alguna carretera, y “haber finalizado desde hace años esta obra, tan necesaria para el desarrollo agrícola de La Palma”.

El portavoz parlamentario de NC, Román Rodríguez, dijo en una interpelación parlamentaria que “esta obra pública es un buen ejemplo de lo que no debe ocurrir”. La balsa de Vicario es una “instalación hidráulica estratégica para La Palma” que se adjudicó en el año 2010 a la UTE Corsan-Corviam Construcción S.A. y Luis Romero S.L por importe de 9,4 millones de euros y con un plazo de ejecución de 30 meses y, “siete años después, estamos todavía a poco más de un 70% de su ejecución”.

Por su parte, el secretario de Organización de Nueva Canarias, Miguel Ángel Pulido, ha manifiestado que es necesario aprender de los errores "y algunos deberían hacerse menos fotos, anunciando que la obra se acababa en 2016, y dedicarle más tiempo a la gestión".