La planificación prevista por la Autoridad Portuaria para la ampliación del puerto de Santa Cruz de La Palma, que fue analizada en la última comisión puerto-ciudad, no afecta tan solo al terreno donde la capital pretende construir la ansiada plaza del siglo XXI, con la creación de aparcamientos subterráneos, sino que además entulla el muelle de pescadores, al que se tendría que buscar una alternativa.
Los diferentes grupos municipales se reunieron ayer en el ayuntamiento para estudiar el plano facilitado por Puertos para la ampliación de su espacio, obras que el ente que preside Ricardo Melchior entiende fundamentales para atender el incremento de actividad, y que incluye la extensión del muelle de rivera.
Tras la reunión, el alcalde, Sergio Matos, confirmó a esta redacción que "el diseño previsto afecta a la dársena pesquera", que por su ubicación sugiere que se destinará a la ubicación de contenedores. Y es que el puerto comercial en Los Guinchos "no es viable por la operatividad de los barcos, que en un futuro serán de mayor envergadura y calado", por lo que "el crecimiento afectará al muellito, al que se le tendrá que buscar una salida", sostiene el regidor municipal.
En este espacio, ubicado ya dentro de los límites del municipio de Breña Alta, no solo operan barcos de pesca y la Cofradía de Nuestra Señora de las Nieves, sino que una ampliación del puerto afectaría además a dos negocios de restauración, una pescadería e incluso a la zona delimitada donde se ubica la escuela insular de vela y de vela latina.
De todas formas, tal y como ha informado esta redacción, el principal hándicap para Santa Cruz de La Palma con la ampliación del puerto, y además de consecuencias notables, es la imposibilidad de desarrollar la entrada al casco histórico. A propósito, el alcalde señaló que todos los grupos presentes en la reunión de ayer "estamos de acuerdo, de forma unánime, en la defensa de la plaza del siglo XXI", tal y como incluso estaba contemplado en el Plan Especial del Puerto.
Sergio Matos es consciente de que el puerto "puede tener sus necesidades de ampliación sobre todo pensando en el incremento futuro de su actividad", pero desde el ayuntamiento "vamos a seguir luchando por un puerto industrial" en la zona norte del municipio. Deja claro que "no vamos a renunciar a la plaza del siglo XXI", una postura que es unánime en el consistorio.
La ampliación del puerto también afecta a su dique principal, con lo que sí están de acuerdo todas las instituciones u organismos implicados, con un incremento de unos 150 metros de la zona de atraque para facilitar la llegada de los grandes cruceros de mayor calado, evitando que se puedan perder embarcaciones de turistas.