La Isla vivió ayer domingo, se espera que también durante al menos el día de hoy, unas condiciones meteorológicas propicias para que en cualquier momento se produjera un incendio forestal, lo que mantuvo a todos los equipos en máxima alerta.

El área insular de Medio Ambiente decidió mantener abierta la red de senderos y las áreas recreativas, permitiendo incluso la práctica de la caza en el primer domingo de la temporada, mientras que, por el contrario, la dirección del Parque Nacional decidió cerrar desde primera hora el acceso al mirador de la Cumbrecita, uno de los más frecuentados de la Isla, quizás el más, por su enorme belleza y sus vistas hacia el interior de la Caldera de Taburiente.

Los datos obtenidos por la mañana en este "rincón" del Parque Nacional eran de rachas de 56 kilómetros por hora de viento, 28 grados centígrados de temperatura y 30 de humedad; es decir, condiciones claras de "ventana" de incendio. La medida, de la que como es lógico se informó al Cecopin, estaba plenamente justificada.

Con estas condiciones sobre la mesa, la orden a los Cuerpos profesionales que deben luchar contra un posible incendio fue clara: todos los equipos en extrema vigilancia, lo que implica, entre otras medidas, dejar de llevar a cabo labores preventivas o de limpieza y estar de patrulla con los equipos de protección individual puestos.

Se busca una respuesta lo más rápida posible ante cualquier conato que se produzca, estando también localizados las organizaciones formadas por personal voluntario.