Quince años han tenido que pasar para que el proyecto de Viviendas Bioclimáticas del Instituto Tecnológico de Energías Renovables (ITER) viera la luz, algo que sucederá el viernes después de que se le den los últimos retoques a unas infraestructuras autosuficientes y respetuosas al máximo con el medio ambiente. El próximo viernes, día 19, es la fecha señalada para inaugurar, sin duda, el poblado más "especial" del mundo en donde el diseño, el buen gusto y la funcionalidad de las 25 propuestas arquitectónicas del ITER son las notas más destacadas.

La arquitectura bioclimática de este laboratorio científico se basa fundamentalmente en utilizar las condiciones climáticas del entorno en donde se construyen los inmuebles. Estas condiciones son apropiadas para realizar estudios, investigaciones, análisis e innovación en materia de energías renovables y su aprovechamiento específico en una arquitectura creada específicamente para tal fin.

La humedad, radiación, temperatura y precipitaciones son parte de los factores ambientales que se tuvieron en cuenta para posteriormente construir cada una de las casas y utilizar y aprovechar todos estos factores "con el objetivo de obtener el máximo confort y reducir gastos energéticos tales como la electricidad, calefacción y aire acondicionado gracias a las más variadas soluciones propuestas por arquitectos internacionales", expuso la aparejadora del ITER, Sendi Marrero.

Integración en el entorno.- Cada una de las viviendas, de 120 metros cuadrados como máximo sobre parcelas de 500 metros cuadrados y un coste de entre 240.000 y 180.000 euros, está integrada en el paisaje de una manera u otra, aprovechando las pendientes y todas abiertas al mar. A su vez las casas tienen como máxima la mayor luminosidad posible con grandes cristaleras y espacios abiertos a la luz. Algunas de ellas se encuentran prácticamente "enterradas" con patios orientados al Norte y abiertas por completo en el Sur para aprovechar el mayor número de horas de sol posible.

Cada una de ellas tienen integradas en sus cubiertas sistemas fotovoltaicos para autoconsumo y están construidas con muros de un considerable espesor para "guardar" el frescor interior de las estancias. La gran mayoría de ellas, además, "juegan" con las alturas, elementos de agua y corrientes de aire para la renovación del aire de los habitáculos en base a sencillas soluciones para mantener la correcta habitabilidad interior.

Habitabilidad y alquiler.- El objetivo para estas viviendas es ocuparlas por un corto periodo de tiempo en condiciones normales de habitabilidad para obtener datos reales de los usos que se tengan de cada una de ellas para realizar un concienzudo análisis cuyos datos servirán para realizar patrones de diseño de edificios adaptados a la climatología de Canarias, casas inteligentes y sostenibles que podrán marcar la orografía insular en unos pocos años.

Este singular poblado de 25 viviendas y su urbanización han costado más de 10 millones de euros, que han sido sufragados por el Cabildo y el propio ITER. Las viviendas se pondrán en régimen de alquiler por cortos periodos de tiempo, costando en torno a los 250 euros la noche (todavía está por decidir), dependiendo del número de personas que la alquilen y el tipo de infraestructura que se ocupe.