Entorno a 200 personas, entre padres y vecinos del barrio de Miramar, de Ofra, se concentraron en la tarde de ayer a las puertas del colegio Tena Artigas en uno de sus últimos intentos por evitar el cierre de este centro, uno de los objetivos de la Consejería de Educación, por considerar que cuenta con un bajo índice de matriculaciones.

A pesar de que ya se ha dicho por activa y por pasiva de que en el próximo curso sus alumnos deben estar matriculados en otros centros de la zona, los padres insisten en que aún no han recibido comunicación oficial, por lo que consideran que "sólo nos han puesto en su punto de mira y nos han faltado el respeto".

Así, desde el APA se anunció que, tras el apoyo recibido ayer, "convocaremos otra manifestación esta semana, sin descartar otro tipo de movilizaciones, para exigir que no se cierre el Tena Artigas".

Por su parte, el director territorial de Educación, José Zenón Ruano, aseguraba ayer que el descenso de matriculaciones ha sido un proceso en el que han tenido una influencia directa los propios padres, quienes, según dijo, "han apostado por otras opciones" a la hora de inscribir a sus hijos". Zenón explicó que la postura de Educación, una vez que parece firme el cierre, "es que se les garantice una plaza en el colegio Buenaventura Bonet, si no encuentran plaza en otros centros de la zona", al margen de que los padres que comuniquen que no encuentran plaza en otros colegios, se les podría habilitar una plaza con el fin de proceder al realojo.

Futuro centro ciudadano

En cuanto al futuro uso del colegio Tena Artigas, que es de propiedad municipal, Zenón Ruano dijo que se barajan varias posibilidades, entre ellas, "su destino como centro ciudadano o sede de la Escuela Municipal de Música".

No obstante, el director territorial recordó que el cierre era una decisión que ya comunicó a los directores de los centros de Ofra hace un año, donde hay un total de 10 centros para 5.000 alumnos, y que en la actualidad sólo acogen a 2.000, circunstancia por la que no ocultó que "se tendrían que cerrar dos centros educativos" del barrio, "escogiendo como primera opción el que menos escolares tiene". En este sentido, dijo que el Tena Artigas llegó a albergar hasta 1.500 niños, y que en la actualidad sólo contabiliza 97, a los que hay que restar 17 bajas y apenas cuatro matrículas en Educación Infantil en el presente curso.

El motivo de esta baja inscripción, lejos de las críticas de los padres, que siempre han apuntado a Educación como la responsable del cierre de los procesos de matriculación y los escasos nombramientos de sustitutos para los docentes de baja, ha sido, según Zenón Ruano, que "muchas familias se han trasladado a la zona de La Gallega y los padres han optado por otro tipo de escolarización" y, como es el colegio que menos alumnos tiene, "por eso se cierra".