El concejal de Seguridad Ciudadana y Vial de Santa Cruz de Tenerife, Hilario Rodríguez, asegura que el Carnaval chicharrero es ahora más seguro que hace una década, cuando accedió al mencionado cargo en el ayuntamiento. Rodríguez señala que las principales mejoras realizadas en los dispositivos de seguridad para las principales fiestas capitalinas consisten en la puesta en marcha del dispositivo centralizado para actuar en servicios de seguridad, sanitarios y de emergencias, así como la colocación de casetas para los cuerpos de seguridad en los lugares con mayor presencia de gente durante las noches, que permiten ofrecer una respuesta más rápida que antes. Asegura que, actualmente, la zona más conflictiva de las fiestas está situada en el recinto de la plaza de Europa, como hace años estuvo en el área de los ventorrillos de estudiantes y otros colectivos, y, posteriormente, en las carpas. Un ejemplo de dicha realidad es que una de las casetas destinadas a la Unidad de Intervención Policial (Unipol) se situó en la mencionada plaza de Europa, donde tuvieron lugar diversas peleas.

El edil indica que, "cuando uno comprueba, de manera sosegada, los datos y el volumen de servicios que realizan las distintas unidades policiales, se valora mucho más el esfuerzo de todos para que nuestro Carnaval siga siendo una fiesta muy segura". En los seis días de mayor intensidad, los agentes municipales cubrieron 3.214 servicios en el recinto carnavalero, gracias a los grupos operativos que trabajan en las casetas distribuidas por los "puntos calientes" de los festejos; la Unipol, la dotación de la Oficina en la sede del Hospital del Carnaval, la unidad de la Fiscalía de Menores para atender los casos de adolescentes, el Grupo de Atestados que se ocupa de las alcoholemias y accidentes de tráfico, así como la Sala de Radio Control, que es la base para la coordinación de recursos y atención directa a los ciudadanos. Los funcionarios del cuerpo de seguridad detuvieron a 17 personas por diferentes delitos, la mayoría relacionados con el tráfico de drogas a pequeña escala, aunque también figuran arrestos por robos, hurtos, lesiones o desobediencias a los policías. La labor preventiva del consumo de sustancias estupefacientes permitió la instrucción de 276 denuncias por tenencia de diversas drogas. Además, los policías locales efectuaron 218 atenciones humanitarias, la mayoría por casos de borracheras, heridas por caídas y solicitudes de recursos sanitarios.

Además, los agentes confiscaron ocho armas prohibidas, todas navajas, en diferentes controles. Hilario Rodríguez señala que este año no constó ningún herido de gravedad por arma blanca durante las fiestas, aunque hubo tres reyertas donde se utilizaron cuchillos, y considera que a dicha situación han contribuido los diferentes registros aleatorios llevados a cabo por los diversos grupos. La cifra de identificaciones y cacheos preventivos ascendieron a 1.330. Los policías locales actuaron para resolver o mediar en unas 200 peleas, aunque muchas de ellas no fueron graves.

Los funcionarios atendieron tres casos de violencia machista y siete incumplimientos de los horarios de cierre de varios locales. Además, los agentes se ocuparon de 43 denuncias por molestias a vecinos, una decena de actos vandálicos y seis casos de daños a la propiedad.

Los policías adscritos a la Fiscalía del Menor detuvieron a un adolescente por agresión y reintegraron a otros cuatro a sus respectivos centros de acogida o internamiento, resolvieron tres denuncias por desaparición, mientras que atendieron a 52 afectados por excesivo consumo de alcohol o drogas.

En cuanto al Grupo de Atestados, los funcionarios intervinieron en 70 accidentes de tráfico, tramitaron 132 actas por tenencia y consumo de drogas en los vehículos, y detectaron 16 alcoholemias positivas.

En las semanas previas al Carnaval hubo una gran polémica acerca de los comportamientos violentos de algunos jóvenes en el interior del tranvía y en algunas paradas de la capital, con imágenes de vídeo incluidas. Hilario Rodríguez señala que "nos sorprendió ver, un año después, imágenes que no habíamos visto".

El concejal señala que la preocupación generada "nos puso a todos en alerta para frenar los actos vandálicos y erradicar el problema en pocas semanas". Para el edil, el plan de prevención para evitar delitos en los diferentes transportes públicos obtuvo resultados positivos en los días del pasado Carnaval.

Además, Rodríguez valora también que la transparencia informativa de los últimos años ha contribuido a eliminar las "leyendas urbanas" negativas sobre la fiesta.