Durante el último trimestre de este año, el Instituto Municipal de Asuntos Sociales (IMAS) ha abonado 700.000 euros que se debían, en algunos casos desde 2007, a casi todas las ONG que trabajan con el ayuntamiento, según explicó José Manuel Arocha, concejal de Asuntos Sociales, a EL DÍA.

Arocha manifestó que estas organizaciones no gubernamentales realizan un servicio importante para el consistorio y que espera que con el abono de esta deuda vuelvan a recuperar la confianza en los responsables municipales.

Este periódico contactó con una ONG que corroboró que el nuevo consistorio le había abonado las cantidades que tenía pendiente de 2009 y 2011.

A finales de este año se cumple un año del levantamiento del estado de emergencia social y, aunque la agilidad de las ayudas ha mejorado, todavía queda por hacer. En el caso de las Prestaciones Económicas de Asistencia Social (PEAS), el nuevo concejal se ha encontrado "con ayudas de 2010 que no habían sido resueltas". Por lo que se está llevando a cabo el abono a los beneficiarios, dijo.

"Ahora mismo se ha incrementado el número de peticiones de ayudas sociales con respecto a 2010", reconoció Arocha, que añade que las más frecuentes y ágiles son las ayudas básicas de alimentos y para abonar facturas de agua.

Para atender estas peticiones se ha previsto en el presupuesto aprobado el viernes que "de cada 10 euros del IMAS; 9,30 son para gasto social".

Las ayudas más rápidas tardan una media de 15 días y comprenden el abono de facturas de agua y alimentos, detalló.

Mediante un acuerdo suscrito con el consistorio, Emmasa no llega a cortar el agua de las personas que le adeudan dinero. Se introduce el número de recibo y la empresa paraliza ese corte que solo traería más gastos. "Con Endesa estamos intentando hacer lo mismo", apostilló el concejal.

También es bastante rápido el envío de la compra a domicilio por parte del IMAS a las personas que se les concede esta ayuda, añadió.

Para agilizar otro tipo de prestaciones que en la actualidad tardan más tiempo, Arocha dijo que se ha apostado por "mejorar la gestión" y que la "intervención sea más ágil". Para ello han incrementado la inversión en el sistema informático y el equipo y se está intentando llegar a acuerdos con las diferentes administraciones para que los demandantes de ayudas no tengan que ir de un lado a otro para obtener todos los papeles necesarios para solicitarla.

Por barrios, Arocha comentó que la Unidad Trabajo Social (UTS) de Añaza había ampliado el local para que pudieran atender a los vecinos de forma más cómoda.

La nueva sede de la UTE de San Andrés "ya está terminada" y "empezará a funcionar en breve", ya que hasta ahora los trabajadores sociales atendían en unos "pasillos".

También estrenarán nuevas dependencias porque hasta ahora el equipo de menores en riesgo de exclusión de El Sobradillo "trabajaba en unos locales bastante deficitarios", añadió.

José Manuel Arocha comentó que la emergencia social se declaró para hacer frente al brusco incremento de solicitudes de ayuda, que pasaron de 5.000 a 9.000 en 2009.

En 2010, se tramitaron un total de 9.083 PEAS y hasta octubre de 2011 la cifra ascendía a 9.982. Asimismo, los Servicios Sociales realizaron a un total de 22.047 atenciones en 2010 y hasta octubre de 2011 la cifra ascendía a 22.119.