Dos murgas adultas y una infantil se encontraron el miércoles de la semana pasada con la desagradable sorpresa de que no iban a cobrar el cien por cien de la subvención económica, como el resto de colectivos de esa modalidad, sino que la organización había establecido un paso intermedio como requisito previo a cobrar toda la ayuda municipal.

Hasta ahora, los grupos nuevos admitidos percibían el primer año el 50% de la subvención, y a la siguiente edición, en su segundo año de participación, pasaban a percibir la totalidad de la ayuda. Eso, que ha ocurrido históricamente, se variará este año, sin aviso previo. Así, los que se estrenan recibirán el 50% de la ayuda, mientras que en el segundo año de participación el ayuntamiento abonará el 75% y no será hasta el tercer año cuando la corporación les abone el 100% de la ayuda.

Según los datos recabados por este periódico, los grupos afectados son las dos murgas adultas que se estrenaron el año pasado, caso de Jocikudos y de Rebotados, así como la infantil Rebobinados.

La desagradable sorpresa la descubrieron cuando minutos antes del sorteo que deparó el orden de actuación en el concurso los representantes fueron a firmar el contrato que regula la asignación económica municipal. En ese momento, aquellos que celebrarán el próximo febrero su segundo Carnaval se percataron de que iban a cobrar menos que los veteranos.

Tras preguntar, fuentes de la organización esgrimieron que, "como era habitual, el primer año se cobra la mitad de la subvención y al siguiente, el 75%", un criterio que fue defendido en el consejo del organismo autónomo de Fiestas que se había celebrado horas antes del sorteo, precisaron. Es más, para dar a valer la explicación, aseguraron que algunos de los expresidentes del organismo autónomo que participan en la actualidad, como ocurre con los exediles de Fiestas Dámaso Arteaga y José Carlos Acha, habían asegurado que no era hasta el tercer año cuando se abonaba la ayuda municipal.

Algunos de los grupos afectados están indignados no tanto por el recorte, que les afecta al perder más de dos mil euros, sino porque la organización no les avisara de sus intenciones. "Ahora ya hemos comprado las telas y nos hemos comprometido con gastos y tendremos que hacer un sobreesfuerzo, lo que supone un revés para nuestra maltrecha economía", explican los murgueros. En este sentido, las fuentes consultadas, que prefirieron guardar el anonimato, aseguraron que los grupos del Carnaval acumulan ya un 13% en la pérdida de poder adquisitivo. "El año pasado recortaron el 7% de la ayuda municipal y ahora aplican el 6%", señalan.

Versión oficial

El concejal de Fiestas, Fernando Ballesteros, explicó en la tarde de ayer que los grupos con dos años de antigüedad cobrarán el 75% de la subvención municipal, y no el 100 por cien como esperaban. El edil aseguró que la asignación presupuestaria ya recoge esta asignación, que priva a cada grupo de entre dos mil y tres mil euros.

No obstante, afirmó que desde Fiestas se intentará buscar fórmulas para ayudar a paliar los contratiempos económicos que le pueda provocar una decisión que se aplicará en firme a partir del Carnaval 2012. Desde la concejalía de Fiestas explican que no se trata de una decisión política, sino técnica, al ajustarse la previsión económica, y aseguran que la decisión ya era conocida por los grupos, extremo que niegan tanto los afectados como los históricos.