La nueva ordenanza del Parque Marítimo dejará claro que no se puede celebrar fiestas nocturnas o eventos que no tengan relación directa con su finalidad como recinto acuático. Así lo anuncia a EL DÍA el concejal de Política Territorial, José Ángel Martín, quien hoy explicará el estado de elaboración de este reglamento modificado durante la comisión de control al gobierno al referirse a ésta y otras acciones emprendidas hasta ahora por la Gerencia de Urbanismo desde que ocupa su puesto en este mandato.

Martín no deja margen para las especulaciones y niega que se otorguen permisos para celebrar fiestas diurnas o nocturnas como ocurrió en el pasado, incluso sin las debidas autorizaciones en virtud de la ordenanza existente. Subraya que el nuevo texto intentará regular sin ambigüedades el uso de este complejo de piscinas, tratando de resaltar al máximo su finalidad inicial y sin descartar eventos que, sin embargo, no se entiendan como fiestas como las que han generado las polémicas de los últimos años.

El concejal no descarta que ese tipo de eventos tengan lugar en el anexo espacio del Auditorio, zona que considera mucho más apropiada para fiestas, aunque aclara que todo dependerá de lo que permita o no el cabildo, la administración competente en este caso.

Durante su intervención de hoy, además y tras una pregunta del PP que no pudo responder por completo en el pleno del viernes, Martín detallará las actuaciones desarrolladas hasta ahora por la Gerencia. Aparte de esta nueva ordenanza, la de Paisaje Urbano o los pasos dados para que exista una sobre aparatos de telecomunicación, el concejal se referirá a "lo mal organizada que estaba antes la Gerencia, que recaudaba poco y mal, aparte de tardar mucho en resolver los expedientes". Según su versión, antes no se recaudaba en vía ejecutiva, mientras que, ahora, el Consorcio de Tributos ya ha aceptado al área como socio para poder cobrar por expedientes.

Además, se ha pasado de tardar 9 o 10 meses en pagar a proveedores a hacerlo en tres, se está aplicando un plan de austeridad y otro de modernización administrativa, al tiempo que se ha centrado buena parte de la atención en el catálogo del "fuera de ordenación", los cambios en el PGO, la aplicación de la directiva Bolkestein, la Montaña de Taco o situaciones como el Valle de Las Huertas.