Con la presencia del obispo de Tenerife, Bernardo Álvarez, distintas autoridades de la capital tinerfeña celebraron en la tarde noche de ayer el 518 aniversario de la fundación de la ciudad. El alcalde, José Manuel Bermúdez, encabezó la comitiva de la llamada procesión de la cruz fundacional junto a otros representantes civiles, militares y eclesiásticos por las calles de Santo Domingo, calzada de La Noria y Domínguez Afonso, célebres vías del centro del municipio que contaron con numerosos vecinos y visitantes interesados en la conmemoración.

Los actos comenzaron sobre las 19:30 horas en la parroquia matriz de Nuestra Señora de La Concepción, donde tuvo lugar una solemne misa a cargo del obispo y de los arciprestazgos del municipio. Tras la eucaristía, que contó con el acompañamiento musical de la Orquesta Juvenil Contemporánea y la Coral Nova Pax, comenzó la procesión de la cruz fundacional o del pendón de la conquista de una ciudad denominada hace 518 años Santa Cruz de Santiago de Tenerife.

Como suele ser habitual, el protocolo hace que el alcalde asista a estos actos como representante de Su Majestad el Rey de España, Juan Carlos I.