El senador tinerfeño y presidente-portavoz del Grupo Popular del Cabildo, Antonio Alarcó, censuró la iniciativa del líder del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, de cobrar el Impuesto de Bienes e Inmuebles (IBI) a la Iglesia, la cual tildó de "injusta e inmoral".

Para Alarcó, "en este tema no hablamos de que se tengan o no creencias religiosas, sino de valorar la labor que realiza esta institución que se ha convertido en la ONG más grande del mundo, con casi un millón de camas hospitalarias, comedores y sedes sociales de las que se hace cargo de forma gratuita".

"El presupuesto que destina la Iglesia a obras de acción social y beneficencia, más de 20.000 millones de euros, supera con creces a lo que aportaría si tuviera que hacer frente al pago del IBI", indicó el senador, quien considera que "la propuesta de Rubalcaba, que no es compartida por todos los miembros del PSOE, es una imprudencia y una cortina de humo".

También recordó que son centenares de personas anónimas las que asumen estas labores de voluntariado.