El gobierno de Santa Cruz tiene previsto reunirse hoy con responsables de la Demarcación de Costas en Tenerife para intentar desbloquear dos proyectos claves en San Andrés y la playa Las Gaviotas. Según indicó ayer el concejal de Obras, Dámaso Arteaga, el consistorio intentará convencer al organismo estatal de la conveniencia de aprobar cuanto antes el proyecto de protección de la ladera de la citada cala y el de reforma de la avenida del populoso barrio pesquero, iniciativas que solo dependen ahora del beneplácito de la Demarcación.

En el caso de la playa, la junta de gobierno local aprobó ayer el proyecto, que se podría desarrollar en dos fases, de manera que se acelere al máximo la apertura de la cala. De hecho, y según recalca Arteaga, lo han elaborado de forma que, con solo 132.000 euros, que aportaría el ayuntamiento, se podría abrir el 70% de la playa al público en solo un mes. Para ello, resulta imprescindible el respaldo de Costas, ya que, sin su permiso, no se podrá intervenir en la zona.

El resto del proyecto de Las Gaviotas requiere cinco meses y 1,1 millones de euros, pero se podría retrasar mientras se logra la financiación si, por lo menos, se cuenta con el 70% de este espacio de baño disponible para los vecinos y visitantes.

Acelerar los plazos

Arteaga recalca la importancia de que se pueda volver a abrir esta playa al público y, por eso y porque el consistorio no está pidiendo dinero ahora, confía en que Costas respalde el proyecto que se le presentará hoy. Si el apoyo se logra a corto plazo, el comienzo de las obras sería inminente.

El caso de la avenida se ha complicado un poco por las exigencias de cambio que le ha hecho Costas al ayuntamiento tras presentarle el proyecto elaborado. Arteaga no quiso ayer detallar esos requerimientos, pero sí insistió en la necesidad de desbloquear este asunto y que se desarrollen cuanto antes unas obras que han sido consensuadas con los vecinos de San Andrés tras diversas reuniones asamblearias o de trabajo.

En este caso, el consistorio dispone de los 700.000 euros que requieren los trabajos, ya que el gobierno le ha dado máxima prioridad a esta actuación. De hecho, el creciente coste que iban teniendo las obras proyectadas a medida que se avanzaba en las decisiones y se consensuaba el resultado final de la reforma no hizo cambiar de opinión al equipo gobernante.

La reforma se aceleró tras la subida de mar acontecida en agosto pasado, que también promovió la redacción del proyecto del ansiado dique semisumergido. La carretera tendrá ahora una única línea de palmeras en la parte central, así como aparcamientos junto a la protección de la vía.