Por segunda vez en la historia del Carnaval chicharrero, el extraño apellido Lemanczyk, de origen polaco, ocupará un puesto de gran relieve. Corresponde al autor del cartel anunciador de 2013, un joven güimarero, de nombre Waldemar (1979), que, desde 2005 y gracias a una iniciativa de EL DÍA, comenzó a plasmar sus ideas artísticas en carteles carnavaleros y que ya ha ganado dos de los tres certámenes abiertos organizados por el Ayuntamiento de Santa Cruz, tras hacerlo en 2010 con el ya célebre mono. Eso sí, ayer demostró su capacidad autocrítica y, tras conocer a primera hora que había sido, de nuevo, el vencedor, no se cansó de explicar que, hace dos años, aprendió "la lección de que estas obras han de incluir algún elemento o símbolo tinerfeño o local", y por eso puso "el chicharro, algo tan nuestro".

El primer sorprendido con el nuevo triunfo de Lemanczyk fue él mismo. De hecho, y a diferencia de 2010, cuando sabía de su éxito muchos días antes de la presentación oficial del cartel, ayer lo supo pocas horas antes de que, sobre las 10:30, se presentara su obra, titulada "Ritmo y color". "El jurado y el gobierno lo han mantenido bien en secreto, aunque hubiera filtraciones a última hora. De hecho, estaba convencido de que no había ganado precisamente por no haberme avisado antes, con lo que la sorpresa y alegría han sido mayores".

El autor considera que, aparte de resaltar elementos idiosincrásicos de la fiesta chicharrera y de la Isla, este tipo de obras han de tener también una proyección exterior y atender a la temática elegida para el próximo Carnaval, en este caso el cine de Bolywood y la cultura hindú. Por eso, considera que la clave pasa por hacer una buena simbiosis de todo, "pero nunca olvidarse de una de esas partes, tal y como hice en 2010, cuando mucha gente me reprochó que no hubiera nada relativo a Santa Cruz, la fiesta o Tenerife. En ese momento fallé, pero ahora he colocado en el cartel la zona del Chicharro, un punto de encuentro muy nuestro que hará que no se eche de menos algo propio".

Lemanczyk es técnico superior de Artes Plásticas y Diseño en Gráfica Publicitaria y cuenta con un amplio currículo en cursos de fotografía, diseño gráfico e imagen, aparte de ganar diversos concursos. El triunfador reivindica los certámenes públicos y la valía de muchos artistas de Tenerife, que, hasta ahora, solo han tenido tres ocasiones para hacer el cartel.

Eso sí, y para evitar también otras malas experiencias de 2010, confía en que, esta vez, su nombre sí aparezca en las copias. "En la otra ocasión no se dieron cuenta y no hubo tiempo de plasmar mi nombre en los carteles".

Conocer la competencia

Sobre su obra, subraya el uso del rosado, rojo y el azul del chicharro. De todos modos, tiene curiosidad por conocer las 26 propuestas restantes, ya que en 2010 tampoco las vio, incumpliéndose la prometida celebración de una muestra. Lo que sí ha sabido es que las otras dos finalistas de 2012 incluyen una máscara y un elefante como temas centrales.

Preguntado por el origen de su apellido, el artista explica que su padre, tristemente fallecido hace 5 años, procedía de Polonia y que se nacionalizó francés. Era legionario y conoció a su madre, natural de Chipude, en La Gomera.

A la presentación de ayer acudieron el alcalde, José Manuel Bermúdez; el concejal de Fiestas, Fernando Ballesteros; el director artístico del Carnaval, Juan Carlos Armas, y el gerente de Fiestas, Francisco Trujillo. El jurado estuvo formado por el estilista Toni Cañadas, el diseñador de fantasías carnavaleras Luis Dávila, el pintor y autor de varios carteles Juan Galarza, el historiador Ramón Guimerá, el gerente y el concejal.