El gobierno de Santa Cruz sostiene que, desde el año 2009, no se ha producido ningún incidente por socavones en la playa de Las Teresitas, lo que choca con la denuncia interpuesta por la vecina Elena Julian Maza el pasado 11 de junio y que acompaña de un parte de lesiones del Hospital Universitario de Canarias. La respuesta gubernamental corresponde al primer teniente de alcalde, Julio Pérez, tras una pregunta presentada por el PP. El líder del PSOE recurre a la información recabada en el Servicio de Control y Gestión Medioambiental, así como de Protección Civil y Cruz Roja, "que confirman que no ha habido incidentes dignos de mención".

No obstante, Pérez explica que, en el verano de 2009 sí se produjo "una inestabilidad en el firme de la zona de baño y que, previo informe de la empresa responsable del balizamiento, se realizó una evaluación de la playa y se observaron huecos en la arena llenos de agua que aparentaban tener el suelo firme". Según señala, "se evidenció un riesgo potencial de caídas relacionadas con dicha inestabilidad", que se explica por la "emanación de agua procedente del drenaje de arena de la playa, que, al no ser local, sino importada y de grano fino, retiene más agua y retrasa el drenaje".

En estos fenómenos, según los informes locales, también influye "que el subsuelo que se encuentra bajo la capa de arena sea rocoso. En pleamar, la arena se empapa, mientras que, en bajamar, la arena drena hacia el subsuelo y hacia zonas más profundas de la playa, hecho que transcurre más lentamente que la bajada de la marea, lo que da lugar a la formación de pequeños riachuelos de agua en la superficie".

Lo anterior origina "zonas excavadas en la arena y, dada la emanación de agua desde el subsuelo, se generan huecos llenos de agua y arena que se localizan de forma dispersa a lo largo de la zona afectada".

Señalizar las zonas

Según el Servicio Medioambiental del consistorio, ante estos casos se debe señalizar las zonas de riesgo y suele ser el personal de vigilancia y socorrismo el que se ocupa de informar a los usuarios, advirtiéndoles de la ubicación concreta y aconsejando otras entradas para el baño. Según este departamento municipal, "hasta ahora nunca ha habido incidentes de los que tengamos constancia. En 2009, se colocaron carteles informativos en las zonas de los huecos en los períodos de mareas largas".