Los vecinos del barrio de García Escámez demandaron al Comité Local del Centro Canario Nacionalista (CCN), durante su visita el pasado jueves, la apertura del mercado de la Abejera, más conocido como mercado de Hierro.

La visita a esta zona de Santa Cruz se realizó antes de lo previsto porque los vecinos se dirigieron directamente a Ignacio González, presidente del CCN, para solicitarle que mediara y acudiera al director General de Comercio y Consumo, Gustavo Adolfo Matos, para que se implique en la apertura de este mercado. "Este inmueble llegó al puerto de Santa Cruz en piezas desde Londres", apuntó Hortensia Navarro, presidenta del Comité Local. El Comité realizó su visita acompañado por la asociación de Mayores Corazón de Jesús, la asociación de vecinos Fernando Rey y la asociación cultural de García Escámez. Todos ellos coincidieron en que la apertura del mercado de La Abejera serviría para reactivar la economía del barrio, creando puestos de trabajo.

El Comité también visitó a las familias del barrio que se encuentran en una difícil situación económica. De todos ellos, Navarro destacó a este periódico el caso de Cristóbal, que está a cargo de sus cinco hijos, dos de ellos padecen discapacidad mental; y el de Luis, un vecino de la zona que atiende durante todo el día a su madre que sufre Alzheimer y a su hermana que padece síndrome de Down. "Nos contó que lleva ocho años cuidándolas y que tuvo que dejar su trabajo porque no tienen a nadie más", explicó Navarro. Este vecino no tiene tiempo para solicitar las ayudas que le permitan acondicionar su casa para poder seguir cuidando de su madre y su hermana. "Desde el Comité nos comprometimos a echarle una mano para que solucione sus problemas con la Administración y para cambiar la bañera por un plato de ducha", recalcó Navarro.

Algunas familias del barrio se acercaron al Comité para solicitar mobiliario y comida, debido a que los bancos de alimentos ofrecen algunos productos básicos, pero estos no cubren todas sus necesidades alimentarias. "Las asociaciones de vecinos nos mostraron que solo les habían dejado pasta, galletas y leche", añadió Navarro.

Los jóvenes le solicitaron al CCN la posibilidad de realizar cursos gratuitos para seguir formándose mientras buscan trabajo.