La concejalía de Obras y Servicios de Santa Cruz seguía ayer con los trabajos de habilitación de un carril provisional y unos 60 aparcamientos en la franja de la avenida de San Andrés más cercana al mar, después de los desperfectos y el levantamiento de parte del asfalto colocado la semana pasada por las últimas crecidas marítimas y algunas olas que superaron con cierta fuerza la escollera.

Tras resultar imposible concluir los trabajos el pasado viernes, el oleaje del fin de semana ha empeorado las cosas, según señaló ayer a EL DÍA el concejal del departamento, Dámaso Arteaga. No obstante, el edil confía en que lo principal se resuelva durante la jornada de mañana y que, tras algunos retoques y detalles, la vía y los nuevos estacionamientos queden abiertos desde este fin de semana.

Según explica, las olas han probado algunos errores de Costas al realizar la reforma de la escollera actual. Por ello, en estos días intentarán reabrir un imbornal más, de manera que se mejore el drenaje y la vuelta del agua al mar cuando se produzcan crecidas.

Lo que sí han hecho los operarios es instalar el nuevo alumbrado, que ya está en funcionamiento.

Las obras coinciden con la etapa en la que más crecidas de mar suele haber. De hecho, este proyecto provisional, así como la reforma integral de la avenida promovida por el ayuntamiento y para la que se han reservado unos 700.000 euros municipales, se aceleraron tras la gran subida de finales de agosto del año pasado. Una crecida sin precedentes que afectó a numerosos comercios y vecinos y que, incluso, hizo que se avanzara bastante en el proyecto del anhelado dique semisumergido, del que se han planteado al Estado tres alternativas distintas.

Combinar las plazas

Los técnicos del área comprobaron la semana pasada la imposibilidad de cumplir con las 80 plazas de estacionamientos anunciadas en esta parte de la avenida, demanda, sobre todo, de los negocios de la zona. La reducción hasta las 60 se debe a las dificultades para habilitar plazas en hilera por la falta de suficiente espacio, por lo que se combinará este tipo de aparcamientos con otros horizontales.

Estos nuevos estacionamientos se colocarán junto a la fila actual de palmeras para alejarlos lo más posible del oleaje. Además, se protegerá diversos tramos de la avenida para minimizar los efectos de nuevas crecidas del mar. Tras estas obras provisionales, se pretende desarrollar el proyecto redactado por el consistorio capitalino y presentado a los vecinos.