"Yo me bañaba en Acapulco y en la playa de los Alemanes, entre un puente y otro. Supone una satisfacción personal y también para los vecinos la mejora de este entorno, tanto por el aspecto histórico como para poder disfrutar del baño en las mejores condiciones". Así se expresó ayer el alcalde de Santa Cruz, José Manuel Bermúdez, en la presentación de la reforma llevada a cabo por la Autoridad Portuaria en el muelle de Cory.

El presidente del ente estatal, Pedro Rodríguez Zaragoza, valoró en 12.000 euros la inversión para reparar la zona, integrada en el BIC como Sitio Histórico junto a las naves carboneras que conectaban con el muelle a través de dos vías férreas y que serán rehabilitadas "más adelante".

Los trabajos, que comenzaron el pasado octubre, han consistido en la restitución de los adoquines originales y los raíles utilizados para el transporte de carbón.

El muelle, construido en 1912, mide 77 metros de largo y siete de ancho. Cuenta con escalera de acceso desde el mar y es utilizado como zona de paseo y baño. Se le llama Cory al ser explotado en origen por la firma británica Cory Brothers and Company, que aún existe dedicada a la Logística.

Rodríguez Zaragoza destacó "la utilización de tablones de madera para tapar los agujeros que se dejaban para llenarlos de pólvora y volarlos en caso de ataques. Dudamos si colocar aquí la vagoneta que se conserva por el posible vandalismo. Estamos a favor del BIC, salvo en la carretera porque en la Vía de Servicios no se podría ni pintar una raya".

En las obras, llevadas a cabo por razones estéticas y de seguridad, se utilizaron materiales procedentes del propio puerto. El presidente explicó: "Faltan dos trozos que pueden estar sumergidos y vamos a intentar recuperarlos también".

El alcalde vinculó todo a la futura playa urbana: "Reivindicamos el proyecto Sol y Sombra. Hay que respetar los muelles y las naves, pero habilitar la zona de baño que reclaman hace 25 años el barrio y Santa Cruz. Solo queda que el Estado dote de presupuesto. Vamos a convocar a los vecinos para que Costas y la Autoridad Portuaria nos den un plazo".

Rodríguez Zaragoza concluyó: "Para desafectar los terrenos basta que me lo pidan, que nos digan qué y dónde. Esa misma tarde se hace y a trabajar".