Los residentes y asiduos de las áreas de Santa Clara y La Multa cuentan desde hace pocos días con la posibilidad, tras varios años, de volver a disfrutar y utilizar las canchas deportivas de ambos enclaves. El área de Obras y Servicios del Ayuntamiento capitalino, que dirige el nacionalista Dámaso Arteaga, concluyó recientemente los trabajos de rehabilitación de unas instalaciones claves que, según el acuerdo alcanzado con las asociaciones vecinales de cada zona, dependerán ahora de los criterios de estos órganos para su uso.

En el caso de la de La Multa, la cancha llevaba sin utilizarse desde 2005, mientras la de Santa Clara, desde hace tres años por diversos avatares naturales y, sobre todo, actos vandálicos.

En la primera, se ha repuesto la instalación eléctrica y aportado material a la asociación vecinal para pintar el exterior. Además, la empresa Dragados ha mejorado los muros, que fueron dañados por la caída de una grúa durante la tormenta Delta. También se reforzó la cimentación de una columna

En la otra instalación también se renovó el cableado, que había sido robado, impidiendo su utilización durante la noche. Aparte de la instalación polideportiva, de la mejora se ha beneficiado la cancha de bolas, los vestuarios y otras dependencias.

El departamento de Arteaga prevé ampliar estas intervenciones en dos semanas con la reapertura de la cancha de Llano Alegre, también afectada durante tiempo por falta de iluminación y en la que se actuará en vestuarios y otras áreas.

Según las previsiones, a partir de ahora estas instalaciones encenderán sus nuevos focos desde las seis de la tarde (sobre todo en horario de invierno), aunque todo dependerá de las decisiones de cada AAVV.

Los tres proyectos han supuesto un desembolso mediante partidas locales de unos 50.000 euros en total, con un plazo de actuación de tres meses.

Las obras se enmarcan en el programa de mejora que la concejalía de Arteaga lleva aplicando desde que comenzó este mandato en las instalaciones deportivas de la ciudad y, en general, en el resto de servicios de los barrios y el casco de Santa Cruz.

En estos casos, el concejal resalta la relevancia de resolver unas deficiencias y carencias que han impedido el uso de espacios públicos durante demasiado tiempo en zonas con tanta población, como Santa Clara.

Las AAVV podrán usar las instalaciones todos los días en el horario que fijen.