Coalición Canaria y el Partido Socialista dan por zanjado el "malestar" que se había creado en el último mes y medio entre ambos socios de gobierno a raíz de unas declaraciones realizadas por el concejal del PSOE José Ángel Martín en las que solicitaba la dimisión del senador nacionalista y exalcalde de Santa Cruz de Tenerife, Miguel Zerolo, tras resultar condenada buena parte de su equipo de gobierno en el caso mamotreto.

El cierre de filas se produjo el pasado viernes en la reunión de seguimiento del pacto regional, en la que estuvieron presentes los dirigentes autonómicos, insulares y locales de ambos partidos. En concreto, por Coalición Canaria, estuvo José Miguel Barragán representando a la dirección regional, Fernando Clavijo por la insular y José Alberto Díaz Estébanez como portavoz municipal. En el otro lado de la mesa, el dirigente autonómico socialista Julio Cruz, el secretario general insular, Manuel Fumero, y la líder de la agrupación local, Patricia Hernández.

Barragán fue el que planteó la necesidad de "lavar los trapos sucios en casa" y abogó por crear una nueva fórmula de diálogo que no implicara llegar hasta la mesa del pacto regional por "pequeños conflictos", apostando por que fueran los máximos responsables de ambas organizaciones en Santa Cruz de Tenerife, es decir, José Manuel Bermúdez y Patricia Hernández, los que asumieran el liderazgo de las conversaciones en una nueva mesa de diálogo de carácter local.

Desde CC se mostraron de acuerdo en aceptar esta propuesta, entre otras cuestiones porque en la práctica significaba la pérdida de peso de José Ángel Martín a favor de Patricia Hernández.

"Que el concejal se centre en la gestión del ayuntamiento y de sus temas, y que la línea política y las estrategias estén en manos de Hernández, algo lógico porque no solo es la secretaria general del PSOE en Santa Cruz de Tenerife sino que además tiene línea directa con la Federal y la Regional por su condición de diputada nacional y eso significa que también estará más vinculada a las decisiones y a las situaciones que se tomen desde arriba", consideran desde CC.

Por su parte desde el PSOE no lo ven como una desautorización a Martín -porque de hecho podrá acompañar a Hernández a la mesa local de pacto- sino que incluso lo ven como una forma de "hablar más y ponernos de acuerdo en más cosas", asegurando que si Martín ha perdido importancia lo mismo sucede con Díaz Estébanez en favor de Bermúdez.

No obstante, desde ambos partidos se destaca la "cordialidad y suavidad" del encuentro del viernes, aunque desde CC se sigue viendo como "el primer toque de atención" a su socio de gobierno "para que no tomen un camino sin retorno", asegurando que "se ha hecho con el objetivo de que no haya un segundo porque ese podría ser definitivo", mientras que los socialistas le restan importancia y aseguran que se trata de un "paso normal" cuando hay un pacto.

Definición de líneas rojas y posibilidades de repetir

La primera misión que tienen los dirigentes de CC y PSOE en Santa Cruz será la de delimitar las "líneas rojas" que unos y otros se marcan para salvaguardar la salud del pacto hasta que este se agote.

Desde CC tienen claro que José Ángel Martín deberá "moderar su discurso", al menos en lo referente a Zerolo y acusar de corrupto a todo el que trabajó o gobernó con él.

Por su parte los socialistas no tolerarán ningún tipo de crítica a su funcionamiento interno y a la publicación de sus boletines "digan lo que digan", aunque contenga titulares como "un Plan General sin pelotazo".

Lo que ambos tienen claro es que no quieren que las posturas se enconen y que "se quemen puentes o se cierren puertas para el futuro", puesto que la idea de que el pacto sea a ocho años parece ser que agrada a ambas formaciones, que se muestran partidarias de "agotar el diálogo".