Las solicitudes de ayudas básicas no dejan de crecer en Santa Cruz de Tenerife, tal y como revela el último balance realizado por el Instituto Municipal de Atención Social (IMAS) del que se desprende que ya son más de 2.400 las unidades familiares que están pagando sus facturas del agua gracias a los recursos municipales. En concreto, a fecha 3 de junio de 2013 eran 2.436 los beneficiarios de una Prestación Económica de Asistencia Social (PEAS), una cifra "preocupante", según confirma la máxima responsable de la Concejalía, Alicia Álvarez, si se tiene en cuenta que durante todo el año pasado se concedieron 6.851 de estas ayudas.

"La necesidad sigue en aumento y es un dato negativo. Quizás es cierto que la demanda ya no crece tan rápido como en años atrás, pero sigue en alza. Esa tendencia no ha cambiado", detalla la edil.

Y es que este número de ayudas se traduce en una inversión superior a los 175.000 euros (178.775) por parte del IMAS solo para garantizar el suministro de agua a las familias con escasos recursos económicos.

"El ayuntamiento está dando respuesta y lo va a seguir dando. Nadie que tenga la necesidad está sin agua. Es más, reto a que alguien me diga un caso de una persona que ha ido a una Unidad de Trabajo Social y se le hay cortado el agua. No hay ni uno solo", insiste Álvarez antes de recordar que "la prestación del agua como cualquier otra ha de pedirse con antelación".

"Se suelen avisar con 45 días de antelación del corte, así que aunque se coja cita para 20 días hay tiempo suficiente para gestionarlo. Lo que no se puede hacer es esperar al último día. Aún así, aunque sea el último día, impedimos el corte porque tenemos un sistema con Emmasa que nos permite hacerlo. Se manda un fax y se paraliza, a veces incluso sin tener los informes necesarios, pero nos da cinco días para que el IMAS investigue la situación y emita el informe en el que ya aclara la situación", subraya la edil.

Y es que Álvarez reconoce sentirse "molesta" con que se de a entender que las ayudas no llegan a todos aquellos que la necesitan.

"Aunque sea en el último momento lo paramos. Ya no se están produciendo cortes, salvo que no se cumplan los requisitos y superen los umbrales económicos o estén conectados de manera ilegal, pero al resto de personas estamos en condiciones de ayudarlas y lo estamos haciendo".

La concejal asegura que si estas medidas se han podido llevar a cabo se debe a una serie de acuerdos tomados con Emmasa gracias a los cuales, al tiempo que se iba liquidando la deuda de 200.000 euros que se arrastraba se iban incorporando una serie de facilidades para los usuarios del IMAS.

"Ahora, por ejemplo, el reenganche en gratuito para 250 casos y nunca los hemos gastado", sentencia la máxima resposable de Servicios Sociales.