Públicos, concertados o privados. Religiosos o laicos. De Grado Medio de FP o de Bachillerato. Del centro de la ciudad o de los barrios. En todos estos escenarios vinculados a centros educativos se ha vivido intensamente durante estos días de finales de junio la clausura del curso 2013-2014. Ese momento en el que se mezclan la alegría por haber cubierto otra etapa y la llegada del verano con la tristeza por separarse de compañeros con los que se han compartido muchas cosas en las aulas. Ejemplos podría haber tantos como el centenar de centros educativos que tienen su domicilio en la capital tinerfeña, pero bastan los tres que acompañan estas líneas.

Por ejemplo, en el caso de los alumnos de 4º de la ESO del colegio Rodríguez Campos, que celebraron la graduación y la entrega de orlas en el hotel Taburiente. Antes posaron para la foto de familia de rigor junto al reloj de flores del parque García Sanabria.

Emocionante final, por otro lado, el vivido en un colegio público, el Centro de Educación de Infantil y Primaria (CEIP) Los Verodes del barrio de Los Gladiolos y en el Distrito Salud-La Salle.

La graduación del alumnado de 6º curso de Primaria estuvo cargada de llantos, risas y un sinfín de anécdotas y recuerdos que permanecerán en las retinas de los asistentes durante mucho tiempo.

La directora del centro, en presencia de la inspectora de zona, dirigió unas breves palabras al centenar de personas reunidas: familiares, alumnos, profesores y amigos invitados.

Un vídeo de presentación de los chicos abrió el evento para dar paso al mensaje a la comunidad educativa de la delegada de curso, un audiovisual de la vida escolar desde el período de Infantil a Primaria, la entrega de orlas y regalos, y, por último, antes del ágape, las sinceras palabras de despedida del tutor, en este caso el maestro José Antonio Muñoz.

Por último, día de despedidas también en el CEIP de Tíncer con el protocolario acto de entrega de orlas. El Distrito Suroeste colaboró con varias carpas que permitieron llevar a cabo una comida de confraternidad al aire libre. El concejal Hilario Rodríguez atendió la petición del AMPA para realizar una jornada festiva que incluyó actuaciones musicales y actividades lúdicas. Una fecha inolvidable para la comunidad educativa.