La demolición ayer iniciada de las naves ubicadas en la trasera de los tinglados del muelle de ribera de la Dársena de Anaga, en el puerto de Santa Cruz de Tenerife, marca el arranque de los trabajos preliminares de la futura estación de cruceros del puerto capitalino, infraestructura que se prevé que esté operativa para la próxima temporada 2015-2016, según anunció ayer la Autoridad Portuaria.
Los trabajos iniciados a primera hora de ayer se prolongarán durante tres meses siendo SYOCSA-INARSA Instalaciones y Servicios la contrata que los ejecuta por un coste ligeramente superior a los 251.000 euros.
Y es que la construcción de la futura estación de cruceros, edificio de más de ocho mil metros cuadrados de superficie, requerirá de la adaptación de servicios y mejoras del equipamiento náutico actualmente existente. Así, además de los trabajos citados, Puertos de Tenerife también deberá materializar otras actuaciones en la misma zona, concretamente en el cantil del muelle de ribera, estando previsto que se adjudiquen antes del final de los trabajos de demolición. Se encuentran en proceso de licitación por un plazo de nueve meses y más de dos millones de euros de presupuesto.
Con estas actuaciones, en líneas generales, se reforzarán la primera y segunda alineación del muelle, en una longitud aproximada de cuatrocientos metros, donde se ejecutará una nueva viga carril dividida en módulos de 23,6 metros de longitud, para soporte de la pasarela de embarque/desembarque que utilizarán los cruceristas. Para transmitir directamente al terreno la sobrecarga que supondrá la instalación de dicho elemento y la del nuevo tiro de amarras, también habrá que construir 187 micropilotes que evitarán la afección al resto de la estructura del muelle.
La Autoridad Portuaria todavía está a la espera de que se apruebe el Plan Especial del Puerto, que se preveía que obtendría el visto bueno del Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife este mes de septiembre. Sin embargo, el Consejo Insular de Aguas realizó un informe negativo. Así, el último consejo de la Autoridad Portuaria aprobó una adenda con las correcciones para remitirlas a la Cotmac y pasar el resto de trámites para volver de nuevo a estar pendiente de la aprobación del consistorio. Otros proyectos, como la instalación de una fábrica de chocolate y galletas de empresarios rusos en terrenos de relleno de la dársena pesquera también dependen de dicha aprobación.