Los caseríos de Anaga han sufrido lo suyo. La lejanía y el tradicional olvido se incrementan cuando se produce un fenómeno como el que azotó la Isla el pasado domingo.

Las imágenes resultan elocuentes y tal como relata Jesús Arrocha, de la asociación de vecinos Islanaga, a los vecinos de Chamorga los mantiene en vilo una enorme piedra, de más de 200 kilos, que arrastrada por las aguas ha quedado depositada en equilibrio inestable sobre el túnel, lo que supone un evidente peligro.

Los propios residentes lamentan que, sin ayuda, hayan limpiado la carretera de piedras y maleza que arrastró el barranquillo. También resulta impracticable el camino hacia Roque Bermejo y no es posible acceder con vehículos la zona del viradero. La escalera que lleva a la cueva de Mingole Veterano II está destrozada.