"Aquí tuvimos un pequeño tsunami el 19 de octubre. Cayó una ola de tres metros que se llevó parte de las viviendas hasta el barranco. He perdido el 80% del material de trabajo (es artista, escultor y pintor) y, prácticamente, la casa. Calculo entre daños estructurales y herramientas, unos 15.000 euros". Lo dice José Alberto Soriano, propietario del número 4 de Pasaje Álvarez 1 entre un paisaje de "zona de guerra" que está "igual que aquel día". Lo corrobora Iván, vecino de Pasaje Álvarez 2, otro de los cinco afectados: "Nos rompió la cocina".

"Pudo ser peor, añade José Alberto, porque mi padre estuvo diez segundos antes de la tromba en la zona que se llevó el agua -con muros de 40 centímetros de grosor- para buscar una herramienta. Y la madre de Iván se quedó aislada. Si el agua corre hacia su lado y no al otro la habría matado". Además, dos chicas que tienen un bajo alquilado tuvieron que salir "con lo puesto". El patio se convirtió en piscina porque "el agua llegó a dos metros y medio de altura", asegura entre puntales "que pusimos nosotros".

Estos vecinos del popular barrio de Buenavista, a la vera del barranco de Santos y detrás de la avenida Islas Canarias, denuncian como sus casas se inundaron, perdieron paredes y habitaciones enteras y corren peligro estructural desde el 19-O. Critican que "el ayuntamiento no nos ayuda. Sólo vinieron de Urbanismo para decir que no podíamos habitar las casas, pero sin más alternativa. Y asistentes sociales del IMAS". Iván apunta: "Mi madre es jubilada y yo desempleado hace tiempo. ¿Piensan que esta es nuestra casa de veraneo o qué?".

Pero ahí no acaba la historia. "Hace un par de días, afirma José Alberto, recibí dos cartas certificadas. En una me dicen que el inmueble, de 80 años, tiene que pasar la Inspección Técnica de Edificios (ITE) y si no hay informe positivo deberé pagar 3.800 euros. La otra carta deniega un permiso de obras que me habían concedido hace cinco meses. El arreglo ya lo hice, se lo llevó el agua y ahora no puedo tocar nada. Es un círculo vicioso porque no podré pasar la ITE y declararán el edificio en ruina".

Soriano reside aquí hace "doce años". Iván y él han visto llover muchas veces. "El 31-M o el Delta cayó tanta o más agua. La diferencia es que ahora han hecho obras en el viario, han puesto cosas y han cambiado otras. L a mala canalización del barranco ha causado esto".

Ambos, junto a otro vecino, abren una cercana alcantarilla donde "desagua todo lo que viene de la avenida de Venezuela. Un pequeñísimo tubo, cuando lo que cae desde allí (señalan calle arriba un muro roto por el gua) es impresionante. Y, además, están juntas las aguas negras (aparece un ejemplo reciente de considerables dimensiones nada más abrir, olor incluido) y las de pluviales. Emmasa lo sabe pero no hacen nada".

El edil de XTF, José Manuel Corrales, denunciará hoy la situación de estos vecinos en riesgo de quedarse sin nada. "Si no hacen algo, volverá a pasar seguro", advierten.